manteniendo la posición.
En un primer momento la acción es física (dura) por lo cual deberemos
tirar con fuerza hasta que el perfil se deforme, donde la fuerza requerida
será menor. En este momento debemos seguir con la acción sin soltar.
El ala se deforma, su velocidad horizontal es 0 km/h, y su velocidad
vertical aumenta hasta los -6 a -8 m/s. dependiendo de las condiciones y
de cómo realicemos la maniobra.
Para salir, se sueltan en un tiempo ambas bandas, el ala tendrá una
abatida suave y retomará el vuelo por sí sola. Es mejor liberar las bandas
rápido que lentamente.
Se trata de una maniobra fácil pero debemos recordar que el parapente
deja de volar, no tiene avance respecto al viento y las reacciones son muy
diferentes al vuelo normal.
5.4 BARRENA
Ésta es la maniobra más efectiva para perder altura rápidamente.
Debemos saber que puede adquirir grandes velocidades incrementando
mucho la fuerza g, llegando a provocar pérdida de orientación y hasta
del conocimiento. Por eso es recomendable realizar esta maniobra
gradualmente para adecuar nuestra capacidad de resistir el incremento
de fuerzas e interpretar la maniobra, siempre con altura.
Para iniciar la maniobra se debe inclinar el cuerpo y frenar suavemente
del mismo lado. Puedes regular la intensidad del giro frenando un poco el
lado externo.
Un parapente en su máxima velocidad de giro, puede llegar a -20 m/seg,
equivalente a 70 km/h de velocidad vertical y quedar estabilizada en espiral
a partir de 15m/seg.
Por este motivo, es muy importante conocer y ejercitar la forma de salir.
Para salir de la maniobra, debemos liberar la acción progresivamente y
frenar e inclinar el cuerpo por un momento breve sobre el lado contrario
del giro (un tiempo), dosificando esta acción, liberando una vez que
comenzó a salir de giro.
Esta acción de salida debe ser realizada gradualmente y con acciones
suaves, para poder registrar los cambios de presiones y velocidades.
Como consecuencia de la salida, el parapente tendrá un momento de
péndulo con una abatida de lado, dependiendo de la forma en que se
realice la salida.
Realiza estas acciones con suficiente altura y moderadamente.
5.5 DESCENSO DULCE
Utilizando esta técnica (no hay que tener prisa por bajar)
permaneceremos en una fase de vuelo normal, sin forzar ni el material ni
al piloto. Se trata de localizar las zonas de aire descendente y girar como
si de una térmica se tratase, claro está que con la intención de descender.
El sentido común nos tiene que aconsejar evitar situarnos en
zonas aerológicamente peligrosas en nuestra búsqueda de zonas
descendentes. La seguridad ante todo.
6. MEDIOS ESPECIALES
6.1 VUELO A REMOLQUE
El IKUMA no presenta ningún problema en el vuelo a remolque. Es
necesario realizar las operaciones referentes a la tracción con un equipo y
personal certificado. El hinchado debe realizarse de la misma manera que
en vuelo normal.
Es importante trabajar sobre un recorrido de los frenos corto en el caso
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