Elija el tipo de combustible girando el interruptor, en el panel de control del quemador.
ATENCIÓN: si el combustible elegido es gasóleo, asegúrese de que las válvulas de corte de las tuberías de alimentación y
retorno están abiertas.
Compruebe que la caja de mandos no está bloqueada; si es así, reármela mediante el botón de rearme LMV.
Comprobar que la serie de termostatos y presostatos permiten el arranque del quemador.
Funcionamiento gas
El presostato de mínima presión de gas, instalado antes de las válvulas de seguridad, garantiza que la red distribuya el gas con una
presión suficiente como para iniciar el ciclo de encendido de la máquina. Conforme a las normas en vigor, el ciclo comienza con la fase
de preventilación.
(Sólo para quemadores con control de estanqueidad) Durante dicha fase y/o cuando la máquina se apaga, comienza el control de
fugas de las válvulas de seguridad del gas, de acuerdo con la configuración del dispositivo. En caso contrario, se produce un bloqueo
de seguridad.
Se enciende el ventilador y el registro de aire, impulsado por el servomando, que se abre hasta la posición de llama alta. El presostato
de aire, al detectar una presión diferencial, garantiza que el ventilador está en funcionamiento En caso contrario, se produce un blo-
queo de seguridad.
Al término de la fase de preventilación, el equipo mueve consecutivamente el servomando a la posición de encendido, alimenta el tran-
sformador de encendido y ordena la apertura del grupo de válvulas de seguridad de gas.
El gas, procedente de la red de distribución, pasa a través del filtro, las dobles válvulas de seguridad y el estabilizador de presión. Este
último mantiene la presión del gas en el cabezal dentro de los límites de utilización.
El combustible y el comburente se encalanan en vías geométricas separadas hasta que se encuentran en la zona de desarrollo de la
llama (cámara de combustión) donde la chispa, descargada por los electrodos de encendido situados en el cabezal del quemador,
debe encender la llama en un tiempo de seguridad que no podrá superar los 3 s, tal y como prevén las normas de referencia.
La presencia de la llama se detecta por medio de una sonda, que pude ser de ionización o por ultravioletas. En caso contrario, se pro-
duce un bloqueo de seguridad. A partir de este momento, la detección de la llama se realizará constantemente, hasta que se apague
el quemador.
Pasado el tiempo de seguridad, el equipo de control de la llama desexcita al transformador de encendido y pone el servomando en
posición de llama baja o de llama alta en función de la demanda de la instalación.
El servomando pasa por debajo del comando del modulador, si existe, o del regulador de caldera (por ejemplo, termostato de llama
alta o baja).
Este actuador mueve al mismo tiempo y de forma proporcional el registro de regulación del caudal de aire comburente y la válvula de
mariposa del combustible, lo que permite optimizar los valores del gas de descarga y, por lo tanto, conseguir una combustión eficaz.
La posición del cabezal de combustión ayuda a regular la potencia del quemador.
Si la variable controlada (presión o temperatura) del fluido de caldera/generador/horno supera un valor preestablecido, se inicia la fase
de apagado de la máquina. El equipo de control de la llama mueve el servomando a posición de llama baja (mínima potencia sumini-
strada), ordena el cierre de las válvulas de seguridad y, si está prevista, ordena el arranque de la fase de postventilación.
Una vez concluida esta última, el quemador se queda en suspenso (stand-by) a la espera de una nueva autorización de la secuencia
de encendido.
Para más información, consulte el manual del equipo que se adjunta.
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PARTE III: FUNCIONAMIENTO