3.20 - INSTRUCCIONES PARA LA PUESTA
FUERA DE SERVICIO Y LA CONSER-
VACIÓN
Para evitar la corrosión debida a la inactividad en ausencia de
presión, las superficies del lado de humos y del lado del agua
de la caldera se deben tratar, en base a la duración de la in-
terrupción del funcionamiento. Cabe distinguir entre mante-
nimiento en húmedo (para el cual es necesario mantener el
oxígeno a distancia) y mantenimiento en seco (para el cual la
humedad debe mantenerse a los niveles mínimos).
Mantenimiento en húmedo
Llene el generador, hasta llegar al nivel más alto con agua de
alimentación tratada. Para evitar la corrosión de oxígeno añada
un aglutinante para oxígeno al agua de la caldera (por ej. sulfito
de sodio) que se mezcle bien con el agua de la caldera (recircu-
lación térmica o mecánica).
Un generador completamente lleno puede protegerse de la co-
rrosión incluso manteniendo la presión con nitrógeno (preferi-
blemente nitrógeno 5.0) en un valor comprendido entre 0.1 y
0,2 bares.
El mantenimiento en húmedo con productos químicos permite
que el oxígeno cree una aleación química que de esta forma
favore una protección contra la corrosión de los materiales de la
caldera. El mantenimiento químico húmedo está previsto para
generadores de vapor durante tiempos breves y largos sin fun-
cionar.
Gracias a un contenido adecuado de aglomerantes para oxí-
geno, con adecuada alcalinización, a una buena mezcla de la
solución de mantenimiento y a un completo llenado de la cal-
dera y del sistema, se evita la corrosión debida a inactividad
prolongada, fácilmente y con total seguridad.
Este tipo de mantenimiento, por el contra-
rio, NO DEBE utilizarse en caso de que exis-
ta peligro de congelación.
ADVERTENCIA
Antes de la nueva puesta en funcionamiento
del generador es necesario efectuar las si-
guientes operaciones:
- Descargue completamente el agua que ha
utilizado para la conservación;
- realice un cuidadoso lavado y un sucesivo
llenado con agua limpia y tratada adecua-
damente.
Mantenimiento en seco
Advertencia
Este método se debe adoptar en caso de pe-
ríodos de inactividad prolongados y como
protección contra el hielo. En este caso no es
posible una nueva puesta en funcionamiento
a corto plazo.
Vaciado completo
Tras el apagado por inactividad, la caldera puede vaciarse rápi-
damente solo cuando la presión es de unos 3 bares. Aténgase
a la temperatura máxima permitida para la introducción en red
la de canalización'pública. Si fuera necesario, el agua debe en-
viarse a un recipiente de recogida y dejarla correr después de
que se haya enfriado.
El lado del agua de los generadores de vapor con un alto con-
tenido de sal en el agua de la caldera (> 5000 µS/cm) debe
lavarse de nuevo. Sucesivamente deben ser abiertos los pasos
de hombre y de la mano.
En las calderas abiertas y secas, coloque los productos dese-
cantes (por ej. gel de sílice, gel de color azul) en bandejas pla-
nas o engánchelos en manera que queden suspendidos y no
entren a contacto con los materiales de la caldera. A continua-
ción cierre la caldera. Al menos una vez al mes se deben con-
trolar las sustancias desecantes y, si es necesario, cambiarlas.
Mantenimiento del lado humos
Después de la puesta fuera de servicio de la caldera se realiza
una limpieza de lado gas del hogar y de los conductos de hu-
mos, abriendo las inspecciones en el lado humos.
Se recomienda proteger la cámara de combustión y los giros
de humo con aceite antioxidante (grafito o pintura). Se puede
rociar o aplicar con un cepillo. Las puertas deben permanecer
abiertas.
Mantenga secas las superficies durante el periodo de inactivi-
dad (usando una sustancia secadora, por ej. gel de sílice).
Cierre todas las comunicaciones hacia el exterior (chimenea
incluida).
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