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El COA-22 es un detector de CO, diseñado para detectar monóxido de carbono en su
entorno. Se recomienda que cada semana realice la prueba del detector de CO utilizando
el botón de prueba en el detector de monóxido de carbono.
ATENCION:
Las fuentes más comunes de CO están presentes en los aparatos de gas utilizados para
calefacción y cocina, en los vehículos en un garaje , bloqueando chimeneas o conductos de
humo, estufas de combustible portátiles, y el uso de las herramientas con combustible de
propulsión en un espacio cerrado.
Todos los combustibles pueden producir monoxido de carbono.
Los síntomas de intoxicación por monóxido de carbono incluyen mareos, fatiga, debilidad, dolor
de cabeza, náuseas, vómitos, somnolencia y confusión.
Todo el mundo es sensible a los peligros del CO, pero están de acuerdo los expertos en que los
bebés no nacidos, niños pequeños, mujeres embarazadas, personas mayores y personas con
problemas de corazón o respiratorios están en mayor riesgo de sufrir lesiones graves o incluso la
muerte. Cada año un instalador cualificado debe realizar una inspección y limpieza de su
sistema de calefacción, ventilación, las chimeneas y los conductos de humos .
¡ADVERTENCIA! - Si la alarma suena, significa que hay niveles peligrosos de monóxido de
carbono presentes! El monóxido de carbono puede ser mortal!
Nota: El detector de CO, COA-22 sólo se emitirá una alarma si el monóxido de carbono
llega hasta el sensor. Es posible que en otros lugares se encuentre monóxido de carbono.
EL MONOXIDO DE CARBONO NO SE PUEDE VER
OLER O PROBAR, Y PUEDE SER FATAL
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