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• En caso de un corte de luz o avería, el congelador se mantendrá frío el tiempo suficiente
para guardar la comida. Sin embargo, trate de evitar abrir la puerta al máximo posible
para alargar la temperatura fría en su interior.
• La cantidad máxima de alimentos frescos (en kg) que puede congelarse en 24 horas se
indica en la etiqueta del aparato.
• Nunca introduzca alimentos calientes en el interior del congelador.
• Al comprar y almacenar los alimentos congelados; asegúrese de que el embalaje
no esté dañado.
• El tiempo de almacenamiento y la temperatura recomendada para el almacenamiento de
los alimentos congelados se indican en el envase. Siga las instrucciones de almacenaje
y uso del fabricante. No guarde la comida más de tres meses si no hay nada indicado
al respecto.
• Coloque los congelados en el congelador tan pronto le sea posible después de
comprarlos.
• No vuelva a congelar la comida ya descongelada, y cocínela tan pronto le sea posible,
para consumirla, o congelarla de nuevo una vez ya cocinada.
• Almacenamiento: Si desea utilizar la capacidad máxima neta, puede quitar los cajones
y almacenar los productos directamente en los tubos de refrigeración. Esto le permitirá
hacer uso de la totalidad del volumen del compartimiento.
Nota Importante:
• Tape los líquidos y guisos antes de ponerlos en el frigorífico. De lo contrario, aumentarála
humedad dentro del frigorífico, lo que puede provocar que el frigorífico fuerce su
funcionamiento normal. Ademá, así presevará también el sabor y el aroma de la comida
y la bebida.
• Si saca los alimentos congelados un día antes de descongelarlos, y los coloca en el
frigorífico, ayudará a que el frigorífico mantenga su temperatura óptima,con lo cual
ahorrará electricidad. Si coloca los congelados del congelador en una zona despejada,
se perderá energía.
Nota:
• Una vez descongelados los alimentos, deberá cocinarlos igual que si fueran frescos.
No vuelva a congelar los alimentos una vez que ya estén descongelados, si no los ha
cocinado antes.
• El sabor de algunas especias que se encuentran en los platos cocinados (anís, basílica,
berros, vinagre, especias variadas, jengibre, ajo, cebolla, mostaza, tomillo, mejorana,
pimienta negra, etc) se modifica y adquiere una intensidad mayor y más fuerte cuando
se almacenan durante un largo período. Por lo tanto, es preferible añadir pocas especias
a la comida a congelar, o deberá especiarla después de descongelarla.
• El tiempo de conservación variará en función de la cantidad de aceite utilizado. Los
aceites adecuados son: margarina, grasa de ternera, aceite de oliva y mantequilla. Los
no adecuados son: el aceite de cacahuete y la manteca de cerdo.
• La comida en forma líquida se debe congelar en vasos de plástico y el resto debe ser
congelado en film plástico o bolsas.
En las páginas 13, 14 y 15 se indican algunas recomendaciones para colocar y guardar los
alimentos en el compartimento de congelación intensiva.
ES - 12 -
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