Los niveles extremadamente altos de energía electromagnética, como los encontrados
en rayos X y rayos gamma, pueden ionizar los tejidos biológicos. La ionización es un
proceso en el que los electrones se eliminan de sus ubicaciones normales en los
átomos y moléculas. Puede dañar permanentemente los tejidos biológicos, incluido el
ADN, que es el material genético.
Los niveles de energía asociados con la energía de radiofrecuencia, incluyendo las
ondas de radio y las microondas, no son lo suficientemente altos como para causar la
ionización de átomos y moléculas. Por lo tanto, la energía de RF es un tipo de radiación
no ionizante. Otros tipos de radiación no ionizante incluyen la luz visible, la radiación
infrarroja (calor) y otras formas de radiación electromagnética con frecuencias
relativamente bajas.
Si bien la energía de RF no ioniza partículas, grandes cantidades pueden aumentar la
temperatura corporal y causar daño tisular. Dos áreas del cuerpo, los ojos y los
testículos, son particularmente vulnerables al calentamiento por radiofrecuencia porque
el flujo de sangre que tienen es relativamente poco para eliminar el exceso de calor.
Resultados de las investigaciones hasta la fecha: ¿Existe una conexión entre la
RF y ciertos problemas de salud?
Los resultados de la mayoría de los estudios llevados a cabo hasta la fecha indican que
no. Además, han fallado los intentos para replicar y confirmar los pocos estudios que
han demostrado una conexión.
La comunidad científica en general cree, por consiguiente, que el peso de la evidencia
científica no demuestra una asociación entre la exposición a la radiofrecuencia (RF) de
los teléfonos móviles y efectos adversos a la salud. Pese a esto, la comunidad científica
ha apoyado la investigación adicional para hacer frente a las lagunas en los
conocimientos. Algunos de estos estudios se describen a continuación.
Estudio Interphone
Interphone es un estudio internacional grande diseñado para determinar si los teléfonos
móviles aumentan el riesgo de cáncer de cabeza y de cuello. Un informe publicado en la
Revista Internacional de Epidemiología (junio de 2010) comparó el uso de teléfonos
móviles para más de 5,000 personas con tumores cerebrales (gliomas y meningiomas)
y aproximadamente un igual número de personas de control saludables.
Información de salud y seguridad
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