Coolaroo PARASOL Manual De Instrucciones página 12

Garantía de los toldos exteriores Coolaroo®
Tipo de garantía: Garantía limitada de cuatro años para toldos exteriores.
Coolaroo® garantiza que sus toldos exteriores no presentan defectos en
el material o la mano de obra cuando se respeta su funcionamiento normal
como toldo y cuando se les brinda el mantenimiento adecuado.
IMPORTANTE: Los toldos exteriores Coolaroo® deben levantarse por
completo cuando haya clima ventoso o inclemencias meteorológicas.
Qué cubre: La garantía de este producto cubre defectos originales en
los materiales o la mano de obra, mientras el comprador original sea el
propietario del producto y siempre que el producto:
1. no haya sido alterado ni modificado en forma alguna respecto de su diseño
original;
2. haya sido correctamente instalado como toldo en una vivienda o edificio
residencial/comercial; y
3. se hayan observado las recomendaciones de Coolaroo® respecto de las
limitaciones y las especificaciones.
A quién cubre: La presente garantía se extiende solamente al comprador
original del producto mencionado anteriormente.
Obligaciones frente al consumidor: Coolaroo® reparará o reemplazará toda
pieza que resulte defectuosa; la pieza de repuesto no extiende el período de
cobertura de la garantía del producto afectado. Dicha pieza de repuesto se
proporcionará al comprador original de los toldos exteriores Coolaroo® de
forma gratuita. Coolaroo® no se hace responsable de los costos laborales,
esto incluye, pero sin carácter restrictivo, medir, retirar el producto, volver a
medir o volver a instalar el producto.
Lo que la garantía no cubre: La presente garantía no cubre condiciones o
daños causados por uso abusivo, accidentes, alteraciones, uso indebido o
inobservancia de las instrucciones relativas a la medición, la instalación, el
uso, la limpieza o el mantenimiento. La garantía no cubre el desgaste propio
del uso, esto incluye los siguientes puntos o hechos.
Daños causados por clima ventoso o inclemencias meteorológicas.
Pérdida de la intensidad del color original de la tela, así como la decoloración
o el agrietamiento de la tela luego de una exposición prolongada al sol.
Deterioro debido a condiciones costeras/salinas.
Cualquier exposición a productos químicos (incluso cloro, halógenos y
solventes orgánicos) u otras sustancias altamente ácidas.
Cualquier exposición a fuentes directas e indirectas de calor que intensifican
y centran el calor en el producto.
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