LIMPIEZA Y MANTENIMIENTO
No utilice solventes, alcohol o acetona para la limpieza del equipo.
El controlador puede limpiarse con un trapo levemente humedecido en
agua. Nunca colocarlo bajo el agua, esto dañaría el equipo y anularía la
garantía.
El vaso nebulizador deberá mantenerse limpio y seco entre cada sesión.
Al finalizar una nebulización, desacople el vaso del controlador, coloque
el cobertor en el conector del vaso y proceda a limpiarlo utilizando agua
destilada. Puede agregar unas gotas de detergente para una mejor
limpieza, pero siempre enjuague con bastante agua destilada. Deje secar
sobre una servilleta de papel.
La máscara, borde autoajustable, cámara de aerosol, y válvulas de
entrada y salida pueden limpiarse bajo el grifo con abundante agua. Es
recomendable utilizar un producto desinfectante multisuperficie.
No utilice elementos filosos para limpiar el nebulizador.
PROBLEMAS Y SOLUCIONES
El nebulizador se encuentra encendido, pero no genera nube de aerosol
Verifique que el vaso nebulizador este bien conectado al nebulizador.
Verifique que hay liquido suficiente en el vaso nebulizador.
Ciertos medicamentos son bastante espesos para nebulizar. Si no están
diluidos en forma precisa con solución salina es probable que no llegue a
generar aerosol. Consulte al veterinario la proporción recomendada para
diluir el medicamento.
Si la difusión es la correcta, verifique que el nebulizador esté
funcionando, colocando únicamente solución salina o agua destilada en
el vaso y encienda el nebulizador.
Si transcurre un tiempo prolongando entre que se introduce el líquido en
el vaso y se enciende el nebulizador, pueden acumularse pequeñas gotas