Tire de las correas a la altura de los
hombros hacia arriba hasta dejarlas
tensas y apretadas. El arnés debe
ajustarse firmemente pero sin causar
molestias a su hijo.
Un arnés suelto puede ser peligroso.
Fíjese que la correa de la cintura esté
puesta cercano a los muslos y no a la
barriga.
Compruebe que el arnés esté bien
ajustado cada vez que se coloque al
niño en el asiento.
El arnés se suelta al presionar el
regulador (debajo de la tapa de
ajuste) que está en la parte delantera
del asiento.
Presione hacia abajo el ajuste, y
agarre las dos correas de los hombros
con la otra mano y tírelas hacia usted
para soltar el arnés.
Tenga cuidado con las correas de los
hombros al momento de presionar la
palanca hacia abajo, estas pueden
quedar atascadas.