Se genera una condición de "AL2" o alarma 2 cuando la concentración de gas en el ambiente supera el nivel
correspondiente (10%). En el equipo, se enciende el correspondiente LED rojo de nivel y se activan el indicador
acústico interno de modo continuo y el relé. Esta señalización óptico-acústica permanecerá mientras la
concentración de alarma se mantenga por encima del nivel correspondiente. Se ha previsto la recuperación al
nivel de reposo siguiendo un ciclo de histéresis, a fin de evitar la desactivación de la alarma a un nivel demasiado
próximo al de activación.
Se genera una condición de "FLT" o avería cuando el sensor o cualquier parte electrónica falla. En el equipo,
se enciende el LED amarillo "FLT" y se activa la señal acústica interna. En este caso, desconecte el equipo y
póngase en contacto con nuestro servicio de posventa.
Puede seleccionar la modalidad de actuación del relé mediante el puente JP1:
-
En la posición 1-2, el relé está normalmente activado y trabaja en modo de seguridad positiva. Una
situación de pérdida de tensión de alimentación desactiva el relé, facilitando una indicación de fallo.
-
En la posición 2-3, el relé está normalmente desactivado y conmuta sólo en caso de alarma.
El sensor está dotado de una salida en modo colector abierto (máximo 40 mA) relativa al watchdog (sistema de
control del microprocesador). Esta salida se activa en caso de mal funcionamiento del microprocesador.
INSTRUCCIONES DE INSTALACIÓN
ATENCIÓN: Lea y respete escrupulosamente las indicaciones:
LA INSTALACIÓN DEL DETECTOR NO EXIME DEL CUMPLIMIENTO DE TODAS LAS REGLAS PARA USO E
INSTALACIÓN DE LOS EQUIPOS DE GAS, VENTILACIÓN Y EVACUACIÓN DE FUGAS DEL LOCAL
PRESCRITAS POR LAS REGULACIONES DE SEGURIDAD.
EL SENSOR NO DEBE INSTALARSE PRÓXIMO A APARATOS DE COCINA, SOBRE LAVADEROS O LAVABOS,
EXTRACTORES Y ALLÍ DONDE LAS CONDICIONES AMBIENTALES SEAN DIFERENTES A LAS
ESPECIFICACIONES DE FUNCIONAMIENTO INDICADAS POR EL FABRICANTE.
AVISO:
LA INSTALACIÓN Y MANTENIMIENTO DEL DETECTOR DEBE LLEVARSE A CABO POR PERSONAL
TÉCNICO AUTORIZADO.
UBICACIÓN:
El gas metano es más ligero que el aire y tiende a subir ocupando la parte alta del lugar. Por ello, el sensor debe
instalarse a 30 cm del techo para obtener una detección eficaz en caso de fuga.
Por el contrario, LPG (gas de petróleo licuado) es un gas más pesado que el aire y tiende a extenderse cerca
del suelo. Por ello, el sensor debe instalarse a unos 30 cm del suelo para obtener una detección eficaz en caso
de fuga.
MANTENIMIENTO Y PRUEBAS
Los sensores de la serie «GUARD» se han calibrado con una muestra de gas, por lo que, en el momento de la
instalación, no requieren calibración alguna. Para llevar a cabo una prueba funcional, se aconseja poner junto al
detector un poco de algodón empapado con alcohol para estimular la detección de gas.
Se requieren pruebas periódicas, cada 6 meses, para controlar y verificar que se iluminan todos los leds y se
activa el relé.
IMPORTANTE: No pruebe los detectores de gas con encendedores ya que el gas dañaría irremediablemente
el sensor.
Durante la fase de prueba, asegúrese de que las aberturas del detector por donde se permite la entrada del gas
no están obstruidas con polvo o suciedad. Si fuera el caso, retire la suciedad con un trapo limpio.
MN-DT-656
15/04/03
(MT876)
NOTIFIER ESPAÑA
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