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f comprobar la existencia de las tomas de corriente para la ventilación permanente, correctamente
dimensionadas y funcionando, tal y como establecen las normas nacionales y locales vigentes según los
aparatos instalados;
f comprobar que el conducto de evacuación de los humos cumpla con las leyes y normas nacionales y
locales vigentes, y que esté en buen estado y sea eficaz;
f comprobar el correcto funcionamiento del sistema de drenaje de la condensación, también en las partes
externas a la caldera, por ejemplo, los posibles dispositivos que recogen la condensación instalados a lo
largo del conducto de evacuación de humos: comprobar que el flujo de líquido no se vea obstaculizado y
que no haya entradas de productos gaseosos de la combustión en el propio sistema;
f comprobar que la entrada de aire de combustión y la evacuación de humos y condensación se realicen
correctamente de acuerdo con las leyes y normas nacionales y locales aplicables;
f comprobar que se garanticen las condiciones de ventilación si la caldera se instala en el interior de
muebles;
f purgar el intercambiador primario, procediendo como se describe en el párrafo "Purga del intercambiador
primario" en la página 32;
f comprobar y, si fuera necesario, cambiar los ajustes electrónicos de la caldera para adaptar su
funcionamiento a las necesidades particulares del sistema (ref. "Parámetros principales de la caldera (PC)"
en la página 34);
Antes de encender la caldera, comprobar que el circulador no esté bloqueado debido a la inactividad
procediendo como se describe en el párrafo "Desbloqueo rotor circulador" en la página 58.
f comprobar que la combustión esté correctamente ajustada: proceder como se describe en el párrafo
"Control de la combustión" en la página 37;
Durante la primera puesta en marcha de la nueva caldera, es necesario que el quemador funcione
durante 30 minutos antes de comprobar la combustión, ya que durante este tiempo se producen los
vapores de los posibles residuos de fabricación que podrían distorsionar el análisis de los gases de
combustión.
f comprobar el correcto funcionamiento general de la caldera en modo calefacción y sanitario;
f completar la documentación requerida y entregar las copias pertinentes al ocupante de la vivienda.
Operaciones de mantenimiento
Las operaciones de mantenimiento periódico consisten en la limpieza de las partes principales de la caldera,
las pruebas de funcionamiento posteriores (en particular, las establecidas por la legislación vigente) y los
ajustes que puedan ser necesarios:
f comprobar que no haya fugas de gas en los empalmes anteriores a la caldera;
f comprobar la conformidad, el buen estado y la eficiencia de todas las conexiones de la caldera (agua, gas,
sistema de calefacción y electricidad);
f comprobar la existencia de las tomas de corriente para la ventilación permanente, correctamente
dimensionadas y funcionando, tal y como establecen las normas nacionales y locales vigentes según los
aparatos instalados;
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