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Q-Jet C10 de Sanosil
5. Preparación de la estancia antes de su desinfección
5.1. Limpieza
La desinfección por aerosoles cubre cada centímetro del conjunto de superficies
de una estancia, pero la penetración de desinfectante nebulizado en o a través
de las capas de suciedad es muy limitada. Los residuos orgánicos no solo ejercen
un efecto catalítico, agilizando la descomposición del peróxido de hidrógeno, sino
que protegen a los microorganismos también físicamente a modo de capa de pro-
tección física. Por lo tanto, en el peor de los escenarios, una estancia sometida a
una limpieza deficiente y con restos de suciedad visibles puede hacer caer en saco
roto cualquier operación esmerada de desinfección por aerosoles. Por lo tanto,
para garantizar la eficacia de la desinfección resulta imprescindible una limpieza ex-
haustiva de todas las superficies (en particular, de superficies de contacto, tales como
pomos, botones, interruptores de la luz, etc.) con aspirador y limpieza en húmedo.
5.2. Desinfección manual mediante rociado y frotado
Dado que la desinfección por aerosoles no está concebida para sustituir la lim-
pieza y la desinfección manuales mediante rociado/frotado, sino como medida
adicional, se recomienda limpiar aquellas superficies con un elevado nivel de con-
taminación (superficies, de contacto, instalaciones sanitarias, aparatos, etc.) apli-
cando el método clásico de desinfección mediante rociado/frotado. Como alter-
nativa, pueden utilizarse productos de limpieza desinfectantes, como, p. ej., ba-
yetas impregnadas en Sano Clean AR.
5.3. Cierre y sellado de aberturas
Para impedir una reducción fortuita de la concentración o un escape de los ae-
rosoles de la estancia que se está tratando, cabe cerrar y, en la medida de lo
posible, sellar con cinta adhesiva todas las conexiones con otras estancias o con
el exterior. Esto incluye ventanas, tragaluces, orificios, conductos de suminis-
tro, etc., así como todas las puertas, a excepción de la empleada para entrar y
salir de la estancia una vez conectado el equipo. Si es necesario, los orificios de
instalaciones de climatización y ventilación pueden obturarse con placas de cu-
brición para CVAA. Durante el tratamiento/desinfección deberán apagarse las
instalaciones de ventilación y aire acondicionado.
5.4. Cubrición de la alarma de incendios
Las alarmas de incendio modernas reaccionan al humo (partículas) Y al incre-
mento de la temperatura. Es menos probable que generen falsas alarmas que
los modelos más antiguos. En su mayoría, estos modelos de más antigüedad
solo reaccionan a unos cuantos parámetros, esto es, pueden interpretar que la
niebla de desinfectante es humo y disparar la alarma. Las falsas alarmas activa-
das a causa del desinfectante en forma de aerosoles pueden evitarse tapando
las alarmas con cubiertas extraíbles para detectores de incendios. Si por motivos
de seguridad la estancia debe permanecer monitorizada con alarmas de incendios, pueden utilizarse detec-
tores de CO/CO
portátiles con función de alarma. En caso de incendio, estos dispositivos reaccionan al in-
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cremento de los valores de gases de combustión sin verse afectados ni activados por la niebla de aerosoles.
PRECAUCIÓN
Riesgos de una desinfección realizada de modo indebido/irritación de las vías respiratorias
En el peor de los escenarios, cuando una estancia no se cierra y sella siguiendo las especi-
ficaciones, la niebla de aerosoles puede extenderse a otros espacios y provocar irritacio-
nes en los ojos y las vías respiratorias. Al mismo tiempo, ello impedirá alcanzar la concen-
tración de desinfectante necesaria en el aire de la estancia que se debe tratar.
Des M03 – manual de instrucciones Q-Jet C10
Manual de instrucciones
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