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15. LIMPIEZA Y PARO DE LA MÁQUINA
Tras bombear la última mezcla, pare el agitador (pág. 2, ref. 8), el
grupo bomba (pág. 2, ref. 1) y el electrovibrador de la rejilla (pág. 2,
ref. 12) presionando el correspondiente pulsador y, si la máquina
posee la bomba de acelerador de fraguado, párela con el corres-
pondiente selector (fig. 20).
¡Pare el bombeo antes de desconectar los tubos!
Antes de aflojar el racor de un tubo de salida de material,
compruebe que no existan componentes en movimiento y
que no haya presión residual en el interior.
Desconecte el tubo de salida del depósito.
Si anteriormente ha montado una válvula de corte manual (fig. 9,
ref. 1) o hidráulica entre la máquina y el tubo, ciérrela y desconéc-
tela.
Abra la tapa (fig. 3, ref. 1) de vaciado del depósito, haga salir el
material residual y, luego, limpie el depósito con un chorro de agua.
Active los pistones en modo aspiración girando el selector (fig. 19,
ref. 1) hacia la izquierda y dirija el agua hacia el conducto de salida
(pág. 2, ref. 9) de la válvula en "S". Siga hasta que el agua del
depósito salga limpia.
Entonces, pare la bomba y cierre la tapa de vaciado.
Deje funcionar el motor diésel en ralentí durante 2-3 minutos;
luego, apáguelo presionando el pulsador ON/OFF.
Controle que no haya residuos de hormigón en el depósito ni en la
válvula en "S".
Unte con aceite u otro lubricante las paredes del depósito y el
interior de la válvula en "S".
Si es necesario, tape el depósito con una cubierta adecuada para
evitar que caigan objetos extraños en su interior.
Si utiliza la hidrolimpiadora, tras conectar los tubos de aspiración
(fig. 22, ref. 1) a una red hídrica con caudal adecuado (al menos
25 l/min) - no aspire agua de un bidón - y los tubos de salida a
la pistola suministrada de serie (fig. 22, ref. 2) y a la conexión de la
máquina (fig. 22, ref. 3), actívela mediante la palanca más corta,
a la izquierda del distribuidor (fig. 19, ref. 3), y empiece el lavado.
Tenga cuidado de no mover involuntariamente la palanca de
accionamiento de la hidrolimpiadora durante el trabajo: si
funciona en seco, se daña irreparablemente en poco tiempo.
No dirija nunca el chorro de agua hacia una persona. Tam-
poco lo dirija hacia el cuadro eléctrico ni hacia otras partes
delicadas de la máquina. No utilice la hidrolimpiadora para
lavar el interior de la bomba.
1
Fig. 22
16. LIMPIEZA DE LOS TUBOS
Los tubos pueden limpiarse de tres maneras: con agua a presión,
con aire comprimido o por aspiración (sólo en caso de bombeo en
altura).
IMER INTERNATIONAL S.p.A.
En concreto:
- con la limpieza por aspiración, el material de los tubos se envía
al depósito; téngase en cuenta que el depósito permite recuperar
unos 200 l.
- En cambio, la limpieza con agua a presión o con aire comprimido
permite emplear todo el hormigón ya que se descarga en el lugar
de empleo.
16.1 LIMPIEZA CON AGUA
Empape una esponja con agua e introdúzcala en el tubo (fig. 23,
ref. 1). Conecte de nuevo el tubo a la máquina. Conecte el reci-
piente (fig. 23, ref. 2) de recogida de la esponja a la salida del tubo,
empleando el racor Victaulic y su junta.
Llene el depósito con agua y active el bombeo.
La esponja puede salir del tubo con fuerza por lo cual
se aconseja poner un recipiente adecuado para recogerla.
En caso de obstrucciones o grumos en los tubos, la esponja
no pasa y, por lo tanto, es necesario invertir el bombeo para
descargar la presión en los tubos y parar la máquina.
El operario tiene que ser adiestrado para efectuar esta
operación; en concreto, antes de desconectar un tubo
aflojando un racor, controle que no exista presión residual y
que no haya nadie cerca. Esta operación la tiene que efectuar
siempre una persona experta, con la máxima precaución.
Por razones de seguridad, durante las operaciones de
limpieza no puede haber nadie cerca del tubo final.
3
Si se crea un grumo en un tubo de acero, desconecte los racores y
elimínelo con un chorro de agua o una barra de hierro. Si el grumo
se crea en un tubo de goma, busque el punto obstruido (el tubo es-
tará rígido). Desconecte el tubo y, con un martillo, golpee el punto
donde se encuentra el grumo para romperlo y permitir la salida del
material endurecido (fig. 24).
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Fig. 23
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