USO DE LA CALDERA
5.6 CONSEJOS PRÁCTICOS Y ADVERTENCIAS
La carga de leña debe ser siempre adecuada al efectivo requerimiento de absorción técnica de la instalación:
grandes cargas de leña en condiciones de absorción limitada de la instalación comportan una larga
permanencia de leña no quemada sobre la capa de brasas. Esta situación favorece la destilación de la leña,
con la consiguiente formación de grandes cantidades de gases y vapores que no se queman, ya que el
extractor que lleva oxígeno al quemador no está en funcionamiento.
Los gases y vapores liberados por la destilación tienden a condensarse dentro de la caldera, formando
gruesas capas de alquitrán que pueden gotear hacia el exterior, ensuciándola abundantemente. Para evitar
esta situación, se recomienda realizar pequeñas cargas durante las estaciones intermedias, de tal forma que
se queme completamente en el tiempo necesario para que la instalación alcance su funcionamiento en
régimen.
Advertencia importante: cuando el ventilador no está en funcionamiento
y se debe abrir la puerta de carga, es necesario tener siempre el rostro y
las manos lejos de la abertura; en esta situación, los gases no quemados
por falta de oxígeno se pueden incendiar repentinamente, enriquecidos
por el aire fresco que entra a través de la puerta abierta, provocando una
situación de peligro para el operador.
5.7 LA LEÑA
Se debe prestar particular atención a las características de la leña: como
todos los generadores de biomasa, el correcto funcionamiento del
generador depende del tipo de madera utilizada y de su grado de curación.
- la leña con un año de secado contiene aún un 40 % de humedad y desarrolla en promedio 2000/2200 kcal por kg;
- la leña con dos años de secado contiene en promedio aún un 25 % de humedad y desarrolla aproximadamente
3000 kcal por kg;
- la leña con tres años de secado contiene en promedio aún un 15 % de humedad y desarrolla aproximadamente
3500 kcal por kg.
Se transcribe la clasificación de la calidad de las maderas:
Se consideran óptimos: fresno, haya, arce, carpe, roble. De calidad
discreta son: abedul, aliso, acacia.
Suficiente: tilo, chopo, sauce, castaño, abeto, alerce. Son poco aptos
los otros tipos de maderas resinosas.
En la medida de lo posible, la leña se debe cortar con una longitud igual a la de la cámara de combustión,
para cubrir toda la base del refractario y obtener también una carga de mayor peso y, por lo tanto, de mayor
duración.
Los troncos se deben colocar apoyados y paralelos entre sí, para reducir al mínimo los intersticios.
Para alcanzar la potencia nominal, la carga de combustible se debe realizar con un lecho de brasas de
espesor no superior a 5 cm.
La potencia máxima útil se alcanza utilizando leña con un diámetro de 5-7 cm. Los troncos más
grandes pueden reducir la potencia del generador.
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