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de manera continua para evitar que el agua pueda rebosar a través del
sistema de emergencia.
7. VENTILACIÓN
El agua del spa puede llegar a alcanzar una temperatura elevada
(aproximadamente 39ºC) provocando condensaciones.
La habitación en la que se ubique el spa debe tener una ventilación
adecuada. Si no es así, se aconseja instalar un deshumidificador que
mantenga la humedad del aire a una temperatura constante e impida
la formación de condensaciones en el techo y en el suelo.
Para el correcto mantenimiento de la madera, la humedad relativa del
aire de la habitación debe mantenerse por debajo del 65% cuando no
se esté usando el Spa.
Durante su uso, y debido a la evaporación provocada por el hidromasaje
y el movimiento del agua, es normal que este valor llegue a ser del 90
o 95%.
La humedad del aire puede mantenerse constante utilizando venti-
ladores controlados por higrostatos o deshumidificadores adaptados al
tamaño de la habitación. Su instalador o distribuidor podrá aconsejarle
al respecto. Si el cuarto tiene aire acondicionado, el condensador no es
necesario. Si el Spa está en un lugar exterior o abierto, estos aparatos
no serán necesarios.
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