12. Programar Estilos de usuario
Puede programar sus propios acompañamientos (Estilos) en
el VA-76. Los Estilos que programe no residirán en la ROM,
razón por la cual los conocemos como Estilos de usuario, o
Estilos creados por el usuario.
12.1 Concepto
Existen tres maneras de crear Estilos nuevos:
• Convirtiendo partes de un Archivo MIDI Estándar en un
acompañamiento que tocará el Arranger (consulte la
página 155).
• Creando acompañamientos nuevos desde cero (consulte la
página 165).
• Editando Estilos existentes, lo cual implica copiarlos y a
continuación alterar los ajustes o las notas que deban cam-
biar (consulte la página 172).
La tercera opción es la más rápida, ya que sólo deberá susti-
tuir estas partes que, de alguna manera, no "funcionen" para
la canción que desea tocar. Programar Estilos desde cero es
mucho más rápido de lo que puede pensar debido a que el
VA-76 dispone de una gran variedad de funciones que per-
miten reducir el tiempo de programación al mínimo.
Patrones
Los Estilos de usuario y los Estilos internos son cortas
secuencias o patrones (normalmente de cuatro, y algunas de
ocho compases de longitud) que puede seleccionar a tiempo
real. Esto es precisamente lo que hemos explicado en "Utili-
zar el arranger del VA-76" en la página 25. Si ya ha trabajado
alguna vez con un programador de ritmos (el BOSS
DR-770, por ejemplo), el concepto de patrón ya le resultará
familiar. Sólo debe programar un patrón una vez, y a conti-
nuación podrá utilizarlo en diversos puntos de una canción.
Es decir, una corta frase musical puede recorrer un largo
camino.
Los acompañamientos basados en patrones están formados
normalmente por los siguientes elementos:
• El ritmo básico, es decir, el ritmo que será la espina dorsal de
la canción.
• Diversas alternativas para el ritmo básico, que hacen que el
acompañamiento sea interesante y que pueden sugerir algún
tipo de "evolución" o "variación".
• Fill-Ins para anunciar el principio de nuevas partes.
• El principio y el final de una canción.
Como norma, basta con programar de cuatro a ocho patro-
nes de percusión para una canción de tres minutos. Simple-
mente debe utilizarlos en el orden correcto para hacerlos
adecuados para la canción, y ya estará preparado para tocar.
En realidad, lo que se conoce como una "canción" en una
unidad de ritmo se conoce como "Arranger" en el VA-76.
Las canciones de una unidad de ritmo deben programarse
de antemano, mientras que los patrones de un Estilo musi-
cal pueden seleccionarse al vuelo pulsando los botones
apropiados o utilizando la función Orchestrator/Morphing.
El VA-76 permite programar 36 patrones diferentes por
Estilo, algunos de los cuales pueden seleccionarse mediante
botones específicos ([ORIGINAL], [VARIATION] o desde la
pantalla, consulte "Orchestrator y Morphing" en la
página 62), o que se seleccionan sobre la base de los acordes
tocados en el área de reconocimiento de acordes del teclado
(mayor, menor, séptima).
Tracks
A diferencia de una unidad de ritmo, un Estilo no sólo con-
tiene la parte de percusión (batería y percusión) sino tam-
bién un acompañamiento melódico consistente en dos o tres
partes musicales, como piano, guitarra, bajo y cuerdas. Ésta
es la razón por la que las divisiones del VA-76 funcionan con
pistas – ocho para ser precisos. Consulte también "Partes del
Arranger" en la página 95.
La asignación de parte a pista es fija. No es posible asignar la
parte ADrums a la pista 6, por ejemplo.
La razón por la que la parte ADrums está asignada a la pista
1 y la parte ABass a la pista 2 es que la mayoría de los progra-
madores y artistas empiezan grabando la sección de ritmo
de una canción.
No obstante, hay algunas excepciones a esta norma, por lo
que puede empezar por cualquier parte si le resulta más sen-
cillo para el Estilo que desea programar.
Nota: Aunque existen seis partes Acc (o Accomp), la mayoría de los
Estilos sólo contiene dos o tres líneas de acompañamiento meló-
dico. En la mayoría de los casos, menos es más, es decir, no pro-
grame seis acompañamientos melódicos simplemente porque el
VA-76 permite hacerlo; demasiadas líneas de acompañamiento
tienden a difuminar los arreglos. Si escucha un CD con atención
verá (quizás para su sorpresa) que no es el número de instrumen-
tos lo que hace que una canción sea "grande", sino el hecho de colo-
car las notas correctas en el momento justo.
VA-76 – Concepto
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