Aplicación de RF y monitoreo de temperatura y permanencia térmica
Al hacer contacto firme entre la superficie activa del electrodo y la superficie de la piel lubricada,
(con Glicerina farmacéutica) la tecnología ATP (Automated Thermal Permanence), un sistema
automático de control de la temperatura y permanencia térmica, actuará dinámicamente en el
control preciso de la temperatura y de la potencia. El equipo de radiofrecuencia estará en
PAUSA al iniciar el tratamiento. Se debe activar el pedal o presionar la tecla START para iniciar
la emisión de RF. Durante la aplicación del manípulo acoplado, el display LCD deberá mantener
la iluminación continua, indicando la temperatura promedio de la piel, o tiempo de tratamiento y
la variación de la potencia.
El sistema ATP asegura que el tejido no se sobrecalentará, causando incomodidades o
lesiones al paciente, y que permanecerá en la temperatura necesaria durante el tiempo
establecido. La temperatura medida por sistema es un valor promedio de las lecturas hechas
sobre el área tratada. La oscilación de la temperatura hasta alcanzar la estabilidad puede variar
hasta ±1,0°C.
Al alcanzar la temperatura del tratamiento, la potencia de RF se disminuye para preservar la
permanencia térmica. De esa forma, el control y la calidad del tratamiento son mantenidos
teniendo en cuenta no solo la permanencia térmica, sino también la impedancia bioeléctrica del
tejido en el área tratada.
Caso ocurra alguna situación donde la temperatura medida sufra una caída superior a 0,9
durante el período de permanencia térmica, el sistema ATP interrumpirá automáticamente el
conteo del tiempo de permanencia térmica y volverá a contarlo a partir del momento en que la
temperatura leída alcance nuevamente la temperatura promedio deseada. Esa interrupción
automática del cronómetro evita ineficiencias del tratamiento, pues garantiza que el tejido haya
permanecido a la temperatura deseada por el tiempo definido.
Es muy importante la uniformidad y regularidad de los movimientos durante
!
las aplicaciones de RF para que haya una lectura precisa de la temperatura y,
consecuentemente, un buen control.
Nunca apunte el sensor de temperatura hacia otro lugar diferente del área en
!
tratamiento durante el procedimiento. Esa acción producirá una interrupción
automática y un mensaje de alerta.
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