(EMF, por sus siglas en inglés)
de la Organización Mundial de
la Salud desde su creación en
1996. Un influyente resultado de
este trabajo ha sido el desarrollo
de una agenda detallada de
necesidades de investigación que
ha impulsado el establecimiento
de nuevos programas de
investigaciones en todo el
mundo. El proyecto también ha
ayudado a desarrollar una serie
de documentos de información
pública sobre temas del EMF.
La FDA y la Asociación de
Internet y Telecomunicaciones
Celulares (CTIA, por sus
siglas en inglés) tienen un
acuerdo formal de desarrollo
e investigación cooperativa
(CRADA, por sus siglas en inglés)
para investigar la seguridad de
los teléfonos inalámbricos. La
FDA proporciona la supervisión
científica, recibiendo informes
de expertos de organizaciones
gubernamentales, de la industria
y académicas. La investigación
patrocinada por la CTIA se realiza
por medio de contratos con
investigadores independientes.
La investigación inicial incluirá
tanto estudios de laboratorio
como estudios de los usuarios
de teléfonos inalámbricos.
El CRADA también incluirá
una amplia evaluación de las
necesidades de investigación
adicionales en el contexto de
los más recientes desarrollos de
investigación del mundo.
7. ¿Cómo puedo averiguar
cuánta exposición a energía
de radiofrecuencia puedo
recibir al usar mi teléfono
inalámbrico?
Todos los teléfonos que
se venden en los Estados
Unidos deben cumplir con los
lineamientos de la Comisión
federal de comunicaciones
(FCC, por sus siglas en inglés)
que limitan las exposiciones a
la energía de radiofrecuencia
(RF). La FCC estableció esos
lineamientos asesorada por
la FDA y otras dependencias
federales de salud y seguridad.
El límite de la FCC para la
exposición a RF de teléfonos
inalámbricos se ha fijado a una
tasa de absorción específica
(SAR, por sus siglas en inglés)
de 1,6 watts por kilogramo
(1,6 W/kg). El límite de la FCC es
Seguridad
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