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Volver a montar el mando y comprobar la
estabilidad de la llama del quemador.
Girar rápidamente el mando de la posición
de máximo a la de mínimo: la llama no
deberá apagarse. Repetir la operación
con todos los grifos de gas.
Regulación del mínimo para gas licuado
Atornillar completamente en sentido horario
el tornillo alojado al lado de la varilla de la
llave.
Después de realizar el ajuste a un
tipo de gas diferente del
originalmente establecido de
fábrica, sustituir la etiqueta de
regulación de gas que se
encuentra pegada en el aparato
con una que corresponda al
nuevo tipo de gas. La etiqueta se
encuentra en el interior del envase
de los inyectores (si está
disponible).
Lubricado de los grifos del gas
Con el tiempo, los grifos de gas pueden
volverse rígidos. Proceder a la limpieza de
su interior y sustituir la grasa lubrificante de
las mismas.
Esta operación debe ser realizada
por un técnico especializado.
Instalación
Verificar que no haya pérdidas de gas
Estas operaciones deben ser
llevadas a cabo la primera vez
que se conecta la barbacoa y
cada vez que ésta sea
desconectada y vuelva a
conectarse a la alimentación del
gas.
Una vez conectada la manguera de la
barbacoa al suministro de gas (GLP),
proceder del siguiente modo:
1. Abrir la válvula de gas en la bombona
de GLP (o rotar el grifo para el suministro
de gas metano), PERO NO INTENTAR
ENCENDER LOS QUEMADORES.
2. Con presión de gas en la manguera y
utilizando jabón y solución acuosa,
verificar que ninguna de las conexiones
presente pérdidas de gas. No utilizar
nunca una llama libre para buscar las
pérdidas.
3. Si hubiera una pérdida, aparecerán
burbujas en la conexión defectuosa por
donde se escapa el gas.
4. Cerrar el grifo de gas de la bombona de
gas, ajustar la conexión con pérdida y
luego repetir la prueba.
5. Si las pérdidas de gas persisten, ponerse
en contacto con el proveedor más
cercano.
No utilizar nunca una llama
desnuda para detectar pérdidas
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