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d) Desinfección:
(d1) Uso directo tras la desinfección: temperatura superior a 90 °C, tiempo
igual o superior a 5 minutos o A0 igual o superior a 3000.
Esterilícelo después de la desinfección y utilice: temperatura igual o superior
a 90 °C, tiempo igual o superior a 1 minuto o A0 igual o superior a 600.
(d2) Para esta desinfección, la temperatura es de 93 °C, el tiempo es de
2,5 minutos y el A0 superior a 3000.
e) Solo se puede utilizar agua destilada o desionizada que contenga un número
pequeño de microorganismos (menos de 10 cfu/ml) para los pasos de aclarado.
(Por ejemplo, agua purificada que se ajuste a la Farmacopea Europea o a la
Farmacopea de Estados Unidos).
f) Después de la limpieza, los residuos químicos deberán ser inferiores a 10 mg/l.
g) El aire que se utilice en el secado debe filtrarse por medio de los filtros HEPA.
h) Repare y examine la máquina desinfectadora con frecuencia.
6.4.5 Secado
Si el proceso de limpieza y desinfección no dispone de una función de secado
automático, seque el producto después de haberlo limpiado y desinfectado.
Métodos:
1. Extienda un papel blanco limpio (paño blanco) sobre la mesa, apunte con el
producto hacia el papel (paño blanco) y seque el producto con aire comprimido
seco y filtrado (presión máxima de 3 bares). La fase de secado del producto habrá
finalizado cuando este deje de rociar líquido sobre el papel blanco (paño blanco).
2. También se puede secar directamente en una cabina de secado (u horno).
La temperatura de secado recomendada oscila entre los 80 °C y los 120 °C, y el
tiempo entre los 15 y los 40 minutos.
Notas:
a) El secado de un producto debe realizarse en un lugar limpio.
b) La temperatura de secado no debe superar los 138 °C.
c) Se debe llevar a cabo una inspección y mantenimiento del equipo utilizado
con frecuencia.
6.4.6 Inspección y mantenimiento
6.4.6.1 Inspección
En este capítulo, se comprueba únicamente la apariencia del producto.
1. Compruebe el producto. Si las manchas persisten en el producto después de
haberlo limpiado y desinfectado, deberá volver a limpiarlo y desinfectarlo.
2. Compruebe el producto. Si el producto está dañado, averiado, se ha
desacoplado o presenta corrosión y dobleces, entonces deberá desecharlo y no
podrá continuar utilizándolo.
3. Compruebe el producto. Si los accesorios presentan daños, reemplácelos
antes de usarlos. Los nuevos accesorios deberán estar limpios, desinfectados y
secos.
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