El depósito de sal está situado debajo de la cesta inferior y debe llenarse de la siguiente
manera:
¡ATENCIÓN!
¡Utilice únicamente sal diseñada específicamente para su uso en lavavajillas! Todos los
demás tipos de sal no diseñados específicamente para su uso en lavavajillas,
especialmente la sal de mesa, dañarán el descalcificador. En caso de daños causados por
el uso de sal inadecuada, el fabricante no ofrece ninguna garantía ni se hace responsable
de los daños causados.
Llene la sal solo justo antes de iniciar uno de los programas completos de lavado.
De esta forma evitará que los granos de sal o el agua salada, que puedan haberse partido,
permanezcan en el fondo de la máquina durante algún tiempo, lo que podría provocar
corrosión.
Después del primer ciclo de lavado se apaga la luz del panel de control.
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A. Retire la cesta inferior y, a continuación, desenrosque y retire la tapa del recipiente de
sal.
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B. Si es la primera vez que llena el recipiente, llene 2/3 de su volumen con agua (unos
500 ml).
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C. Coloque el extremo del embudo (suministrado) en el orificio e introduzca
aproximadamente 1,2 kg de sal. Es normal que salga una pequeña cantidad de agua
del recipiente de sal.
D. Vuelva a enroscar la tapa con cuidado.
E. Normalmente, la luz de aviso de falta sal se apagará 2–6 días después de que el
recipiente de sal se llene de sal.
NOTA: 1. El recipiente de sal debe rellenarse cuando se encienda la luz indicadora de
falta sal en el panel de control. Aunque el recipiente de sal esté suficientemente lleno, es
posible que la luz indicadora no se apague antes de que la sal se disuelva por completo.
Si no hay una luz de falta sal en el panel de control (para algunos modelos), puede juzgar
cuándo cargar la sal en el descalcificador por los ciclos que el lavavajillas había realizado
(vea el siguiente esquema).
2. Si hay derrames de la sal, se puede ejecutar un programa de lavado para eliminarlos.
AVISO: Si no se añade sal, el efecto de limpieza de la vajilla será deficiente y se producirá
cal.
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