Las manijas de frenos poseen un tornillo regulador de alcance o abertura (Figura 24 c) que
se utiliza para modificar la distancia de recorrido de las mismas. Para aumentar la abertura,
ajustar en sentido horario dicho tornillo regulador y para disminuirla, desenroscar en
sentido anti-horario.
Las manijas de freno poseen tornillo de regulación del sistema (Figura 24 c.), desde donde
se ajusta la distancia de activación del frenado. Enroscando en sentido horario dicho
tornillo se afloja la tensión del cable aumentando la distancia de activación del frenado y
desenroscándolo en sentido anti-horario se tensiona el cable acortando la activación del
frenado.
Además posee un tornillo regulador con contratuerca de fijación autofrenante, ubicado al
otro extremo del cable, que se opera desenroscando o enroscando, según sea necesario.
Se recomienda mantener una luz de 1 a 2mm entre los patines y la llanta.
El sistema es más eficaz en situaciones de lluvia o humedad.
Aumenta la duración de la llanta, ya que al no haber patines, la superficie de frenado de la
llanta no se desgasta.
Si a causa de un golpe se deformare la llanta, el sistema seguirá funcionando.
Los discos de freno no deben ser golpeados, ya que al dañarse se hace necesario reponerlos
por nuevos. Las pastillas de freno deben ser reemplazadas cuando la eficiencia de frenado
disminuye notablemente y no alcanza con la regulación del freno para que este funcione
correctamente.
AJUSTE DE LOS FRENOS Y RECOMENDACIONES SOBRE LA SUSTITUCIÓN DE
COMPONENTES DE FRICCIÓN
La palanca de freno no debe entrar en contacto con el manillar.
El revestimiento del cable no debe doblarse en ángulos cerrados para que los cables se
muevan con una fricción mínima.
Los cables dañados, deshilachados u oxidados deben sustituirse de inmediato.
Las zapatas tienen que alinearse con el flanco de la llanta y a una distancia de 1 a 3 mm. En
ningún caso debe tocar los neumáticos.
Los frenos de disco tienen que supervisarse con regularidad y deben comprobarse todos los
pernos de los frenos, así como el desgaste de las zapatas de freno (el grosor no debe ser
inferior a 1 mm).
El ajuste de los frenos debe efectuarse tal y como aparece indicado en el apartado
«Preparación para su uso». Se recomienda acudir a un mecánico profesional para realizar
estos ajustes. En el caso de tener que sustituir algún componente de fricción del sistema
de frenado, el uso de recambios originales garantiza que se conserve la eficiencia de la
bicicleta. Esta operación deberá dejarse en manos de un mecánico profesional.
Página 18 de 28