Tabla de contenido
Publicidad
Informe técnico
Nota
Los cambios en la configuración de afinidad de nivel no producen resultados medibles inmediatamente porque la configuración no actúa en
las páginas existentes hasta que la página se clasifica para la promoción (afinidad de rendimiento) o se necesita para liberar espacio en un
nivel superior (afinidad de archivo).
La ajuste predeterminado del sistema es No Affinity (Sin afinidad), valor recomendado para la mayoría de los volúmenes. El ajuste No
Affinity intenta localizar las páginas más calientes del nivel más alto, y todas las demás páginas del siguiente nivel más alto con capacidad
libre. Con tres niveles configurados, el nivel de archivo permanece sin usar hasta que no quede capacidad en los niveles superiores, ya que
de lo contrario se reduciría innecesariamente el rendimiento. El nivel de archivo es el primero al que se accede para el desbordamiento de
páginas y se utiliza para almacenar solo las páginas más frías o las nuevas escrituras cuando no hay ningún otro lugar donde escribir datos.
El ajuste de afinidad del nivel de rendimiento es un ajuste atractivo para cualquier volumen, pero debe aplicarse con moderación. Este ajuste
suele aplicarse para datos de aplicación que necesitan con frecuencia un rendimiento de tecnología flash, pero que presentan periodos
prolongados entre una mayor actividad de lectura. En un sistema equilibrado, no debería ser posible migrar el contenido de todos los
volúmenes al nivel de rendimiento a través del ajuste de afinidad del nivel de rendimiento porque no habría suficiente capacidad, y la eficacia
se ve negativamente afectad. Si es necesario que todos los volúmenes estén en el nivel de rendimiento, sería más apropiado tener un pool
dedicado a un grupo de almacenamiento all-flash o considerar una cabina all-flash de cualquier otra parte del portfolio de HPE Storage.
Con mayor frecuencia, la configuración de afinidad de nivel más útil es la de Archivo, que permite el uso del nivel de archivo incluso cuando
la capacidad permanece en los otros niveles. Al ser el nivel de menor rendimiento en un pool, el nivel de archivo es muy adecuado para los
datos a los que no se accederá después de su escritura inicial en el disco, o cuando no se requiera un alto rendimiento. Por ejemplo, los datos
como las imágenes de disco, los datos de prueba o las secuencias de vídeo de CCTV son buenos candidatos para esta configuración. El uso
de esta estrategia ofrece dos ventajas:
• Libera capacidad en los niveles de mayor rendimiento para su uso en volúmenes más sensibles al rendimiento.
• Reduce la E/S del back-end necesaria para migrar páginas de un nivel a otro.
Caché de lectura SSD
Por regla general, la clasificación por niveles de rendimiento es la mejor manera de aumentar el rendimiento global del sistema. Sin embargo,
en los entornos en los que las cargas de trabajo son en su mayoría de lectura aleatoria, la caché de lectura de los SSD ofrece excelentes ventajas
a un coste incluso menor. La caché de lectura SSD no cuenta para la capacidad de las cabinas y, por lo tanto, no requiere redundancia a nivel
de disco ni ninguna licencia. Además, aunque se ha diseñado para acelerar las lecturas aleatorias, la descarga de las lecturas en el SSD libera
a las unidades de disco duro del procesamiento de E/S, lo que puede mejorar aún más el rendimiento.
La caché de lectura de SSD es compatible con los pools que contienen un solo nivel o un nivel de archivo, y funciona dentro del siguiente
conjunto de reglas:
• Mínimo de una unidad por pool (NRAID)
• Máximo de dos unidades por pool (RAID 0)
• Una capacidad máxima de caché de lectura direccionable de 4 TB por pool
• No se puede utilizar con la clasificación por niveles de rendimiento dentro del mismo pool
• Se admite un pool configurado con la caché de lectura del SSD y otro como un grupo de discos de capacidad y clasificación por de niveles
de rendimiento
Importante
Lo ideal es que la caché de lectura de SSD represente el 80 % o más de las E/S típicas en un plazo de 24 horas. Una vez que se ha configurado
la cabina y se han establecido las cargas de trabajo, es posible evaluar el uso de la capacidad diaria revisando el gráfico de carga de trabajo
de E/S de la cabina. Antes de la producción, una regla segura es que la caché de lectura del SSD debe ser del 10 % al 15 % de la capacidad
total del pool. Sin embargo, HPE recomienda que la caché de lectura del SSD no sume menos del 10 % de la capacidad total del pool. Si es
inferior al 10 %, es probable que el rendimiento sea menos predecible con el tiempo a medida que el pool se va llenando de datos. Por el
contrario, el aumento de la caché de lectura del SSD más allá de estas recomendaciones devaluará cada vez más el ahorro de costes que
hace posible el mecanismo de caché de lectura del SSD.
Con una capacidad máxima direccionable de 4 TB por grupo, el SSD que resulta más práctico del portfolio actual de HPE MSA es el SSD de
1,92 TB de lectura intensiva (RI). Dos unidades RI proporcionan 3,84 TB de caché de lectura SSD, lo que permite una capacidad de hasta
38,4 TB por grupo, manteniendo la relación recomendada entre las unidades de disco flash y las mecánicas.
10
NRAID (no RAID) solo se aplica a la lectura de grupos de discos de caché.
11
RAID 0 solo se aplica a la lectura de grupos de discos de caché.
10
11
Página 16
Publicidad
Tabla de contenido
