1. Primero determine el objeto que quiere ver. Cualquier objeto brillante del cielo nocturno es un buen punto
de partida. Uno de los puntos de partida favoritos en astronomía es la Luna. Es un objeto celeste que con toda
seguridad agradará tanto a cualquier astrónomo en ciernes como a los veteranos con mucha experiencia.
Cuando llegue a dominar este nivel, hay otros objetos que pueden convertirse en buenos blancos. Saturno,
Marte, Júpiter y Venus son unos buenos segundos pasos que se deben tomar.
2. Lo primero que tiene que hacer después de montar el telescopio según lo planeado es centrar el objeto
deseado en la cruz reticular del visor de localización. Siempre que haya hecho el alineamiento del visor de
forma razonable, una mirada rápida por el tubo del telescopio principal a una potencia baja deberá revelar
la misma imagen. Con el ocular de potencia más baja (la que tenga el número mayor impreso en el mismo)
deberá ser capaz de enfocar la misma imagen que vio a través del visor de localización. Evite la tentación
de pasar directamente a la potencia más alta. El ocular de potencia más baja le proporcionará un campo de
visión más ancho y una imagen más brillante—haciendo así muy fácil la localización del blanco previsto.
En este punto, con una imagen enfocada en ambos visores, ha superado el primero obstáculo. Si no ve
una imagen después de haber tratado de enfocarla, puede considerar la posibilidad de volver a alinear su
visor de localización. Una vez que supera este paso, disfrutará del tiempo empleado realizando un buen
alineamiento. Cada uno de los objetos que centra en el visor de localización podrá encontrarlos fácilmente
en el tubo del telescopio, lo cual es importante para seguir la exploración del cielo nocturno.
3. Los oculares de potencia más baja son perfectos par ver una luna llena, planetas, cúmulos de estrellas,
nebulosas, y hasta constelaciones. Estos deben ser sus cimientos. Sin embargo, para más detalle, trate de usar
aumentos más altos con oculares de potencias más altas en algunos de estos objetos. Durante las noches
en calma y nítidas, la línea de separación de luz/oscuridad de la Luna (denominada el "Terminator") es
maravillosa usando una potencia alta. Puede ver montañas, colinas y cráteres delante de sus ojos. De igual
forma, puede usar un mayor aumento en los planetas y las nebulosas. Los cúmulos de estrella y las estrellas
individuales se pueden ver mejor con las potencias menores en cualquier caso.
4. El teatro astronómico recurrente que denominamos cielo nocturno es una especie de valla publicitaria en
constante cambio. En otras palabras, no se ve la misma película todo el tiempo. Más bien, las posiciones
de las estrellas cambian no solamente cada hora mientras parece que aparecen y desaparecen, sino que
también cambian a lo largo del año. A medida que la Tierra describe su órbita alrededor del Sol, nuestra
perspectiva de las estrellas cambia siguiendo un ciclo anual por dicha órbita. La razón por la que parece
que el firmamento se mueve a diario de igual forma que el Sol y la Luna se "mueven" a través del nuestro
cielo, es que la Tierra gira alrededor de su eje. Como resultado, puede que observe que transcurridos unos
cuantos minutos o segundos, dependiendo de la potencia a la que esté mirando, los objetos de su telescopio
se moverán. A aumentos más altos, especialmente, observará que la Luna o Júpiter aparecerán como si
estuvieran "corriendo" justo desde el campo de visión. Para compensar, sólo tiene que mover el telescopio
para hacer su "seguimiento" siguiendo la trayectoria necesaria.
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cÓmO DISFruTAr De Su NuevO TeLeScOPIO