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b.
Prioridad de máxima potencia: La demanda mayor
potencia baja se encarga de controlar la estrategia de
recuperación de calor Esto resulta adecuado para
aplicaciones en las que es necesario cubrir más rápido las
demandas tanto de calefacción como de refrigeración.
Este modo implica cambios de ciclo más frecuentes.
c.
Prioridad de la refrigeración: Si la unidad funciona
en modo de recuperación y se producen ambas demandas,
la demanda de potencia frigorífica se encarga de controlar
la estrategia de recuperación.
d.
Prioridad de la calefacción: Si la unidad funciona
en modo de recuperación y se producen ambas demandas,
la demanda de potencia calorífica se encarga de controlar
la estrategia de recuperación.
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