Directiva CEM n°2014/30/UE
Conserve este manual para futuras consultas. Si revende este aparato, asegúrese de
entregar también este manual de usuario al nuevo propietario.
Desembale completamente el aparato y todos sus accesorios. Compruebe que no hay
daños y que el aparato está en perfectas condiciones.
Es importante utilizar el cable de alimentación de red suministrado (cable con toma
de tierra).
Desenchufe siempre el aparato antes de repararlo o realizar cualquier operación de
mantenimiento.
Temperatura ambiente máxima para un funcionamiento óptimo del aparato: 40°C. No
utilice el aparato si la temperatura ambiente supera este valor.
En caso de avería, apague inmediatamente el aparato. No intente repararlo usted
mismo. Póngase en contacto con su distribuidor o con un taller especializado
autorizado. No hay piezas sustituibles por el usuario, excepto el fusible.
No conecte este aparato a un regulador de intensidad.
Para reducir el riesgo de descarga eléctrica o incendio, no utilice este aparato en
condiciones de humedad o lluvia.
No mire directamente al haz de luz. La luz láser puede causar daños permanentes en los
ojos.
Este aparato debe instalarse utilizando un gancho resistente y de tamaño adecuado al
peso transportado. El aparato debe atornillarse al gancho y apretarse correctamente
para evitar que se caiga debido a las vibraciones producidas por la máquina durante
el funcionamiento. El gancho debe asegurarse con una eslinga de seguridad.
Asegúrese de que la estructura (o punto de enganche) puede soportar al menos 10
veces el peso del aparato que se va a enganchar.
El aparato debe ser instalado por una persona cualificada y mantenerse fuera del
alcance del público.
Locales de operación: Siempre que sea posible, un LÁSER debe ser operado en una
sala o área reservada para este fin, cerrada o demarcada.
Los accesos a los locales y sus aberturas al exterior no deben estar situados en la
trayectoria de un haz directo.
El suelo debe estar libre de obstáculos. Deben eliminarse las causas de reflexión y
dispersión accidental de los rayos láser (ventanas mal colocadas, muebles u objetos
con superficies pulidas).
La pintura (paredes, tabiques, techos, etc.) y los revestimientos de suelos deben ser
preferiblemente mates. A este respecto, los reflejos difusos de los láseres de clase 4 y
los haces enfocados de los láseres de clase 3 con luz visible o casi infrarroja deben
considerarse peligrosos y tratarse como tales.
Cuando se utilicen láseres potentes (clase 3 con haz focalizado o clase 4), debe
eliminarse la posibilidad de que el haz golpee materiales inflamables (madera, papel,
11