3.4 Principio de funcionamiento
El funcionamiento de la caldera lo controla el cuadro de mando en
función de la temperatura externa y de la demanda de calor.
Cuando el quemador está en marcha, los productos de la
combustión pasan a través de la caldera, donde tiene lugar la
primera transferencia de calor hacia el agua de calefacción.
Después los gases quemados pasan por el condensador, donde se
produce la segunda transferencia de calor. Este calor recuperado
por el intercambiador del condensador se reinyecta en el circuito de
calefacción.
El condensador está protegido por 2 termostatos:
- El termostato limitador de seguridad de rearme manual, que
controla la temperatura de los productos de combustión a la salida
del condensador. Este termostato corta la alimentación eléctrica
del quemador si la temperatura alcanza los 120 °C.
- El termostato limitador de seguridad de rearme automático, que
controla la temperatura del agua de calefacción dentro del
condensador. Este termostato corta la alimentación eléctrica del
quemador si la temperatura alcanza los 80 °C.
Los productos de combustión se evacuan por la tobera de humos del
condensador.
Los condensados se recuperan en la parte inferior del condensador,
y desde allí se envían hacia un sifón y después a una estación de
neutralización. El cierre de agua del sifón tiene una profundidad
importante para garantizar la estanqueidad del conducto de
evacuación de los productos de combustión.
Los condensados de las calderas de condensación de gasóleo son
ácidos. Para proteger los conductos y el medio ambiente se
recomienda instalar un sistema de neutralización de condensados.
Los condensados neutralizados pueden entonces verterse a la red
de alcantarillado.
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GTU C 330
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