El acero inox
El acero inoxidable es una aleación ferrosa compuesta de varios elementos. El elemento principal de
la aleación es el hierro, que lo constituye con una proporción del 50%, junto con otros elementos
como el níquel, cromo y molibdeno que le dan mejores prestaciones.
En particular la resistencia a la corrosión viene garantizada por el níquel, cromo y molibdeno.
El acero inoxidable tiene la característica de formar una sutil capa superficial de óxido que evita al
hierro que contiene de oxidarse.
El acero inox utilizado por nosotros es el AISI 316L el cual contiene aparte del níquel y del cromo el
molibdeno en un 2-3%.
En alternativa, para algunos productos y número sensiblemente menor, se puede utilizar también
el AISI 304, en el cual está presente también el níquel, pero en menor concentración, pero no está
presente le molibdeno. En el caso en que se utilice este tipo de acero vendrá indicado oportunamente
en la documentación del producto.
Resistencia a la corrosión AISI316L
Resistencia a la corrosión AISI 304
En la mayor parte de las aplicaciones pueden ser utilizados productos realizados con ambas
tipologías de acero inox (AISI 316 L – AISI 304) mientras que para aplicaciones en zonas de mayor
corrosión (ambientes externos : sobre todo zonas de mar y piscinas) e más aconsejable los productos
realizados con acero AISI 316 L
Como se conservan las características inoxidables del acero inox
En base a lo anteriormente citado el mantenimiento del acero inox consiste en preservar la capa sutil
de óxido que forma la película de protección, evitando que el hierro contenido en el acero tenga un
contacto directo con el aire circundante. Y evidentemente que cualquier causa impida la permanencia
de la capa de óxido sobre la superficie del acero, reduciendo la resistencia a la corrosión.
Seguidamente enumeramos las principales causas que pueden generar la oxidación más o menos
marcada del acero inoxidable:
1. Residuos ferrosos que se dejan decantar sobre superficies húmedas (no secadas)
2. Restos calcáreos acumulados y no limpiados en su momento
3. Detergentes a base de cloro y amoniaco
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