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Procedimientos de purga de la
transmisión
Debido a los efectos del aire sobre la efi ciencia
de las aplicaciones de transmisión hidrostática, es
fundamental purgar el sistema.
Los procedimientos de purga se deben realizar
siempre que se haya abierto un sistema hidrostático
para facilitar el mantenimiento o cuando se haya
añadido más aceite al sistema.
Entre los síntomas derivados de los sistemas
hidrostáticos se encuentran:
•
Funcionamiento ruidoso.
•
Falta de potencia o transmisión tras un breve
periodo de funcionamiento.
•
Elevada temperatura de funcionamiento y
excesiva expansión del aceite.
Antes de arrancar, asegúrese de que el depósito de
aceite está lleno hasta el nivel adecuado. En caso
contrario, llénelo siguiendo las instrucciones descritas
en esta sección.
Los siguientes procedimientos se deben realizar
preferentemente con las ruedas del vehículo
separadas del suelo, repitiendo la operación a
continuación en condiciones de funcionamiento
normales.
8. Desactive el freno si está activado.
9. Con la válvula de derivación abierta y el motor
en marcha a ralentí rápido, mueva lentamente
el control de dirección en ambas direcciones,
adelante y atrás (5 o 6 veces). El nivel de aceite
irá bajando a medida que se purga el aire de la
unidad.
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LUBRICACIÓN
10. Con la válvula de derivación cerrada y el motor en
marcha, mueva lentamente el control de dirección
en ambas direcciones, adelante y atrás (5 o 6
veces). Compruebe el nivel de aceite y añada
más si es necesario una vez que haya detenido el
motor.
11. Si fuera necesario, repita los pasos 2 y 3 hasta
que el aire se haya expulsado por completo del
sistema. La purga se ha realizado correctamente
cuando la transmisión hidráulica funciona
con niveles normales de ruido y se desplaza
suavemente hacia delante y atrás a velocidades
normales.
12. Tras utilizar el vehículo un par de veces, debe
comprobar el nivel de aceite en frío y ajustarlo
convenientemente.
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