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con la otra mano las bandas A para ayudarla a que suba. De este modo no usarás los frenos y
así no llevarás tus manos hacia la hélice.
Sujeta los cordinos A en la mano izquierda junto al freno izquierdo y el mando del gas (si lo
tienes en el lado izquierdo), y las bandas D con la mano derecha junto al puño de freno
derecho (y el mano de gas si lo llevas en esa mano). Una vez tengas la vela en la vertical,
sueltas las A y las D y luego giras 180 grados para orientarte al viento, al tiempo que
mantienes la vela arriba y controlada. Una vez notes que la presión es uniforme y que la vela
está situada de manera estable sobre ti, puedes acelerar. Cuando estés ya volando, continúa
enfrentado al viento para ganar suficiente altura.
No intentes de ganar altura deprisa aplicando mucho freno, pues la resistencia adicional que
causan los frenos reduce la tasa de ascenso real. Si no hay obstáculos presentes, es más
seguro volar nivelado durante un poco de tiempo tras el despegue, y ganar algo de velocidad
antes de convertirla en altura. Como ya mencionamos, no trates de sentarte de inmediato en
la silla nada más dejar el suelo, pues seguirás estando relativamente bajo. En lugar de ello,
continúa enfrentado al viento, asciende hasta alcanzar una altura segura y luego cierra poco a
poco el gas antes de sentarte en la silla.
Es mejor empezar a aprender sin el paramotor esta técnica de despegue inflando de espalda y
con las A y las D. Una vez la hayas practicado un poco, podrás comenzar a probarla con el
paramotor. Esta técnica te permitirá preinflar la vela de manera que forme una especie de
pared, y poder situarte justo en el centro de la misma.
Para echar la vela al suelo con viento fuerte o cuando abortes un despegue, en lugar de tirar
de los frenos, tira de las bandas C o D. Usar los frenos con viento fuerte generará más
sustentación y eso podría despegarte del suelo y arrastrarte de manera peligrosa.
¡Regla de oro!Para cualquier aeronave, lo más importante en el despegue es disponer de
velocidad suficiente. Con ángulos de ataque altos y velocidades bajas es más probable que se
produzca una pérdida.
¡¡ATENCIÓN!!En caso de fallo de motor siempre debes tener la posibilidad de poder aterrizar
con seguridad.
Demasiado freno durante el despegue es arriesgado. Dependiendo del diseño y la potencia de
tu paramotor, es posible que notes el par motor mientras no estés bien sentado en la silla.
Debes estar preparado para compensar con uno de los frenos ese par motor y la posible
tendencia a girar que muestre la vela y continuar volando recto. También puedes compensar
el par ajustando el cruzado de tu silla, si lo lleva, o ajustando el cordino compensador de par
del Charger de la banda opuesta al giro que esté ocasionado el par. Ajustar los trimmers de
manera distinta en cada lado y cargar tu peso al lado opuesto al que la vela quiera girar
ayudarán a mantenerla volando recta tras el despegue
Dominar la técnica de despegue inflando de espalda puede llevar cierto tiempo. Darse la
vuelta en la dirección equivocada puede dar lugar a que el piloto despegue entuistado, es
decir, con las bandas reviradas sobre ellas mismas. Practica de antemano con tu instructor la
técnica de despegue inflando de espalda sobre una pendiente escuela para ir adquiriendo
confianza. Una vez más, asegúrate de tener el motor apagado hasta que hayas practicado lo
suficiente para evitar que los cordinos puedan entrar en contacto con
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