En correspondencia con sus costumbres culinarias, el filtro de metal para grasa hay
que limpiarlo más o menos cada dos semanas.
Los filtros de metal y los marcos de acero inoxidable hay que dejarlos bien en remojo
en agua caliente de fregar, limpiarlos después con un cepillo suave, y enjuagarlos
después bien con agua caliente. Si fuera preciso, repetir el procedimiento.
Los filtros de metal (no los marcos de acero inoxidable) pueden lavarse también en
el lavavajillas con un programa normal con 55 ° C.
Debido a posibles deposiciones de grasa en la vajilla o a la acumulación de restos
de comida en la rejilla, los filtros de metal para grasa deben lavarse separadamente
de la vajilla y de los vasos y copas. Los filtros de metal para grasa muy saturados
hay que dejar previamente que se reblandezcan bien dentro de agua caliente de
fregar.
¡Indicación! Al limpiar el filtro metálico para grasa se debe tener cuidado de no
dañar la rejilla. Una limpieza frecuente o el empleo de productos limpiadores
agresivos puede dar lugar a que se produzcan decoloraciones en la superficie de
metal. Tales decoloraciones no tienen influencia alguna en el funcionamiento del
filtro y no son razón para una reclamación.
Después de la limpieza, una vez secos, vuelva a montar los filtros de metal para
grasa siguiendo el orden inverso conforme a la fig. 7 y sigs.
Filtro de carbón
Para retirar el filtro de carbón (fig. 8), tirar hacia adelante de los dos clips de fijación
delanteros del marco del filtro. Después de sacar de su envase el nuevo filtro de
carbón, hay que distribuir uniformemente el granulado contenido sacudiendo.
Al colocar el nuevo filtro de carbón, preste atención para que las lengüetas de
sujeción del filtro estén orientadas hacia adelante. Enganchar primero el filtro de
carbón en el marco por la parte inferior, y abatir hacia adentro entonces el borne
superior del filtro hasta que encaje (fig. 8.1).
Fig. 8
Fig. 8.1
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