METODOLOGÍA
Cloruro
El cloruro es un anión que existe predominantemente en el espacio extracelular. Mantiene la integridad
celular mediante su influencia sobre la presión osmótica. Es también importante en los equilibrios ácido-
base e hidroelectrolítico. En la acidosis metabólica, hay una elevación de la concentración de cloruro
concomitante con la reducción de la concentración de bicarbonato.
Los niveles de cloruro disminuidos que se observan en los vómitos severos, la diarrea severa, la colitis
ulcerosa, la obstrucción pilórica, las quemaduras severas, la acidosis diabética, la enfermedad de Addison,
la fiebre y las infecciones agudas tales como neumonía.
Los niveles de cloruro aumentados se ven en la deshidratación, el síndrome de Cushing, la
hiperventilación, la eclampsia, la anemia y la descompensación cardíaca.
Glucosa
La glucosa en la principal fuente de energía del organismo. El cerebro y los eritrocitos dependen
totalmente de ella para sus necesidades energéticas. Por ello, la concentración sanguínea de glucosa
desempeña un papel importante en el metabolismo energético, y su mantenimiento es esencial para la
supervivencia. La concentración sanguínea de glucosa viene determinada por un equilibrio entre la
utilización de glucosa y su ingestión en la dieta, o por su síntesis en el organismo. Alteraciones en este
equilibrio pueden producir hiperglucemia (concentraciones sanguíneas de glucosa elevadas) o
hipoglucemia (concentraciones sanguíneas de glucosa bajas). Ambas alteraciones tienen consecuencias
graves sobre la salud y precisan tratamiento, lo que explica por qué la determinación de la glucosa
sanguínea es uno de los análisis de laboratorio más solicitados. Además, el tratamiento de la
hiperglucemia puede provocar hipoglucemias en un paciente si no se controla adecuadamente.
Alteración en las concentraciones
La hiperglucemia puede estar motivada por varias causas, secundarias a la diabetes mellitus o no
secundarias a la diabetes. En este punto debe recordarse que la diabetes mellitus es un síndrome de
hiperglucemia crónica provocado por la deficiencia absoluta de insulina, la reducción de la respuesta
tisular a la insulina, o ambas causas. Se trata de una alteración frecuente que se diagnostica según
criterios estrictos, basados en la determinación de las concentraciones sanguíneas de glucosa. Entre las
hiperglucemias no diabéticas se encuentran la posprandial (que se produce inmediatamente después de
una comida con hidratos de carbono), la facticia (cuando se extrae sangre del mismo brazo en el que se
está infundiendo glucosa), la motivada por fármacos (que produce una insensibilidad tisular a la insulina),
por una enfermedad endocrina no pancreática (por una producción excesiva de hormonas
antiinsulínicas), por alteraciones pancreáticas (diabetes mellitus secundaria) y por estrés (de tipo físico
o psicológico, que produce un aumento de la secreción de cortisol y catecolaminas).
La hipoglucemia es una enfermedad aguda, identificada por una serie de signos y síntomas
característicos que se acompañan de hipoglucemia bioquímica y que se alivian con la administración de
glucosa. Por sus causas puede distinguirse entre hipoglucemia por fármacos/toxinas, hipoglucemia
reactiva e hipoglucemia por ayuno. La primera está provocada por un exceso en la concentración de
determinados fármacos o toxinas, como la insulina (la sobredosis de insulina es la causa más frecuente
de hipoglucemia), hipoglucemiantes orales o sulfonilureas, etanol y otros fármacos como los salicilatos o
propranolol. La hipoglucemia reactiva se produce en el plazo de 5 horas tras una comida con hidratos
de carbono en pacientes que, por otra parte, no presentan alteraciones, en pacientes con diabetes
mellitus del adulto de instauración precoz y en pacientes que han sido sometidos a cirugía gástrica.
d
Manual de Operación – Analizador de Cuidado Crítico OPTI CCA-TS