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C
•
USO DEL CIERRE DE LOS HUMOS
El cierre de los humos se puede regular en 4 posiciones: I, II,III y IIII. El cierre de los humos permite regular la combustión correctamente
según el tiro del humero (que varía en función de las condiciones atmosféricas). Se recomienda familiarizarse con el uso del cierre de
los humos para optimizar el funcionamiento de la chimenea. Para regular el cierre de los humos:
• girar el mando hasta que la muesca quede en la posición deseada;
CERRADO (I) (Fig. 1):
Funcionamiento con óptimo tiro para la obtención de la potencia
térmica nominal declarada.
SEMICERRADO (II o III) (Fig. 2, Fig. 3):
• Funcionamiento con tiro y combustión mejorables (ej. cristal sucio)
• Funcionamiento con poca leña
ABIERTO (IIII) (Fig. 4):
• Durante el encendido
• Al abrir la puerta para cargar la leña mientras está funcionando
• Funcionamiento con tiro y combustión mejorables (ej. cristal sucio)
La atenta regulación de la compuerta de humos es fundamental para el funcionamiento correcto de la chimenea.
ATENCIÓN
Se puede seguir utilizando la chimenea de leña también en caso de apagón eléctrico.
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5.
Cerrar la puerta.
6.
Encender la centralita en modalidad invierno con función automática o manual
Cuando las maderas están casi consumidas, recargar la termochimenea con poca
leña, dejando siempre abierto el cajón de la cenizas.
Cuando la leña está quemada y aún hay brasas, es posible añadir la cantidad
máxima de leña, o según las exigencias
La potencialidad de la chimenea y la duración de la carga están reguladas por la
cantidad de aire comburente.
•
COMBURENTE
Por el tipo de funcionamiento, a excepción de la carga, la puerta de la termochimenea
debe estar siempre cerrada para la correcta combustión, y para evitar que salgan
en el ambiente los humos de la combustión. El desmontaje o alteración, no
autorizada por Jolly -mec , del cierre comporta el decaimiento d la garantía.
En caso de apertura de la puerta de la termochimenea durante el funcionamiento de
la misma, para cargar la leña, u otra operación, utilizar obligatoriamente un guante
de protección, y hacerlo cuando en el interior de la termichimenea hay brasas o no
hay llamas.
No abra la puerta rápidamente, de lo contrario se corre el riesgo de que se verifique
una salida de humo.
D
Abrir la puerta lentamente solo un poco, antes de abrirla totalmente.
Añadir otra leña solo cuando están las brasas, de lo contrario podría correr el riesgo
de pérdida de los productos de la combustión.
No añada nunca una cantidad mayor de leña aconsejada: cargar 2 troncos de leña
(D) (sin superar los 2/3 kg/h de leña).
Para evitar una combustión no óptima, la ceniza debe ser movida con la herramienta
correspondiente y con atención de manera que la rejilla no se obstruya y el aire de
alimentación pueda fluir libremente.
•
FIN COMBUSTIÓN
(Esto vale también cuando la instalación no está en funcionamiento)
Esta fase se alcanza cuando la leña está completamente quemada y no hay coim-
bustión con o sin llama.
Fig. 1
Fig. 2
Fig. 3
Fig. 4
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