Fig. 4
A
Fig. 6
Fig. 8
Fig. 10
Fig. 11
30
Fig. 5
Fig. 7
B
Fig. 9
C
2.
Limpieza deflector de humos
Cada 20 días o también más frecuentemente según el tipo de
combustible utilizado, del tiro del humero y de las condiciones
climáticas, es obligatorio extraer el difusor superior y limpiarlo, para
evitar que se cierre la salida de humos, causando retorno de humos
en ambiente.
Desmontar el deflector de humos siguiendo estas modalidades:
a). Desenganchar de su alojamiento el deflector (Fig. 4),
pcolocado arriba las rasillas, tirándolo hacia el frontal del agarre
correspondiente (A).
b). hacia abajo de manera que el hollín depositado caiga en el
compartimento fuego, para poder ser eliminado (Fig. 5) y (Fig. 6).
c). Volver a posicionar el deflector arriba de la rasilla posterior
(B), de manera que el agarre entre en contacto con la rasilla,
para evitar posibles caídas accidentales (Fig. 7).
Es posible, para limpiezas más profundas de la caldera (que
verificarse en función del uso), desmontar completamente el
deflector de su propio alojamiento: repetir las fases a-b descritas
anteriormente, y luego mandarlo hacia atrás hasta desengancharlo
de las guías laterales (C) (Fig. 8) y (Fig. 9).
3.
Limpieza del turboclean
La limpieza del turboclean (Fig. 10) debe hacerse cada dos meses
cuando se detecta una mala combustión o salida de humo de la
puerta.
a) abrir el deflector de humos;
b) Desenganchar el deflector de humos (Fig. 8 y Fig. 9)
c) Sacudir con una herramienta el turboclean en el humero.
En caso de suciedad excesiva desmontarlo, levantándolo algunos
centímetros y girándolo 90°. Extraerlo del humero y limpiar la
ceniza con un pincel.
4.
Limpieza del cajón de cenizas
Vaciarlo periódicamente cuando sea necesario.
El cajón de las cenizas está dotado de una parada de seguridad
para evitar aperturas no permitidas. Levante el cajón para extraerla,
mientras que, para decirlo, simplemente introdúzcalo en su asiento
(Fig. 11).
NOTA: Durante el funcionamiento normal, verifique que el cajón
está completamente cerrado