eSpAñol
Mantenimiento
Limpieza del cristal
Jøtul F 600 está equipado con tiro superior (depuración de
aire). A través del respiradero de tiro, el aire se aspira por
encima de la chimenea y se depura a lo largo del interior
del cristal. Este sistema tiene la ventaja de que mejora la
combustión y reduce la acumulación de depósitos de hollín
sobre el cristal.
Aunque siempre se adhiere algo de hollín al cristal, la
cantidad dependerá de las condiciones de tiro locales y del
ajuste del respiradero de tiro. La mayor parte de la capa de
hollín se suele quemar cuando se abre completamente el
respiradero de tiro y arde un fuego vivo en la chimenea.
Un buen consejo: Para la limpieza normal humedezca
una toalla de papel en agua caliente y añádale cenizas de
la cámara de combustión. Frote el cristal con la toalla de
papel y luego límpielo con agua limpia.
Eliminación de la ceniza
Jøtul F 600 está equipado con una bandeja que facilita la
eliminación de cenizas. Sacuda la ceniza para que caiga a
través de la parrilla de la placa base a la bandeja para la
ceniza. Utilice un guante o un trapo para sujetar el tirador
de la bandeja para ceniza y retirar la ceniza. Asegúrese
de que la bandeja para ceniza no se llena hasta el punto
de impedir que la ceniza caiga a la bandeja a través de la
parrilla.
Asegúrese de que la puerta de la bandeja para ceniza
está cerrada firmemente mientras se esté utilizando la
estufa.
Siempre conviene dejar algunas cenizas en la cámara
de combustión como capa protectora contra la base de
la estufa. Vea asimismo la descripción donde se explica
cómo manipular las cenizas en la sección "Medidas para
prevención de incendios".
Limpieza y eliminación del hollín
Pueden acumularse depósitos de hollín sobre las
superficies internas de la estufa durante su uso. El hollín
es un buen aislante y, por lo tanto, reduce la producción
de calor de la estufa.
Será necesario limpiar el interior una vez al año para
obtener el máximo efecto de calentamiento del producto.
Es una buena idea hacerlo cuando desholline la chimenea
y los tubos de humos.
40
Deshollinar los tubos de humos a la
chimenea
Los conductos de humos se deshollinan levantando la
placa superior ovalada suelta, que facilita el acceso a
los tubos. Es posible deshollinar a través de la trampilla
de deshollinamiento del tubo de humos o a través de
la abertura de la puerta del producto. En este caso se
deberá retirar antes la placa deflectora. Vea las secciones
correspondientes en: Conservación.
Control de la estufa
Jøtul le aconseja que controle personalmente la estufa
de forma minuciosa después de deshollinar o limpiar.
Compruebe si existen fisuras en las superficies visibles.
Compruebe también que todas las uniones están selladas y
que las juntas están bien colocadas. Deberán cambiarse las
juntas que muestren signos de desgaste o deformación.
Limpie a fondo las ranuras de la junta, aplique adhesivo
cerámico (disponible en su proveedor Jøtul local) y presione
sobre la junta para que encaje en posición. La unión se
secará en poco tiempo.
Mantenimiento externo
Tras algunos años de utilización es posible que los
productos pintados sufran una alteración en su color. Debe
cepillarse la superficie para limpiarla de partículas sueltas
antes de aplicar una pintura para estufa Jøtul nueva.
Los productos esmaltados deben limpiarse únicamente
con un paño limpio y seco. No utilice agua jabonosa. Las
manchas pueden eliminarse con un líquido de limpieza
(un producto para limpiar hornos, etc.).
Longitud, cantidad y calidad de los
troncos
Los troncos que se utilicen deberán tener una longitud
máxima de 55 cm. Colóquelos paralelos a la pared posterior
de la cámara de combustión. La emisión de calor mínima de
Jøtul F 600 es de 3,5 kWh y la capacidad nominal es de 10,0
kWh. Se ha calculado que se necesitarán aproximadamente
4,0 kg de leña de buena calidad por hora para lograr la
emisión de calor nominal.
Definición de madera de buena
calidad de Jøtul
La madera de buena calidad debe secarse de modo que el
contenido de agua sea aproximadamente del 20 %.
Para ello, se debe cortar la madera a finales de invierno
o comienzos de la primavera. Después se deberá cortar y
apilar para asegurar que se airee correctamente. Se debe
cubrir la leña apilada para evitar que absorba demasiada
agua de lluvia. Los troncos deben guardarse en un lugar