Ionización; Controles - baltur TBML 80 PN Manual De Instrucciones

aumentar el valor de regulación hasta verificar su intervención
en la que debe conseguir la parada inmediata en "bloque" del
quemador. Desbloquear el quemador presionando el pulsador
correspondiente y poner la regulación del presostato a un valor
suficiente para detectar la presión del aire existente durante la
fase de preventilación. El circuito de conexión del presostato
prevé el autocontrol y, por consiguiente, es necesario que el
contacto previsto para ser cerrado en condiciones de reposo
(ventilador parado y ausencia de presión de aire en el quema-
dor), realice efectivamente esta condición; en caso contrario,
el aparato de mando y de control no se conecta (el quemador
se queda parado).
•
Los presostatos de control de la presión del
gas (mínima y máxima), si están instalados, sirven para
impedir el funcionamiento del quemador cuando la presión
del gas no está comprendida entre los valores previstos.
A partir de la función específica de los presostatos resulta
evidente que el presostato de control de la presión mínima
debe utilizar el contacto que se encuentra cerrado cuando
detecta una presión superior a la que ha sido regulado, el
presostato de máxima debe utilizar el contacto que encuentra
cerrado cuando detecta una presión inferior a la de regulación.
La regulación de los presostatos de presión mínima y máxima
debe, por tanto, llevarse a cabo en el momento de la prueba
del quemador en función de la presión que se detecta en su
momento. Los presostatos están conectados eléctricamente en
serie, por tanto, la intervención (entendida como apertura del
circuito) de cualquiera de los presostatos del gas, no permite
la activación del aparato y, por consiguiente, del quemador.
Cuando el quemador está en funcionamiento (llama encendida)
la intervención de los presostatos del gas (apertura del circuito)
determina inmediatamente la parada del quemador. En la prue-
ba del quemador es indispensable verificar el funcionamiento
correcto de los presostatos. Accionando oportunamente los
respectivos dispositivos de regulación nos aseguramos de
la intervención del presostato (apertura de circuito) que debe
determinar la parada del quemador.
• Verificar la intervención del detector de llama (véase capítulo

CONTROLES).

• Verificar que funcionan correctamente los termostatos o pre-
sostatos de la caldera (la intervención debe hacer que pare el
quemador).
Controlar que el encendido se lleve a cabo
!
normalmente porque, en el caso de que se
haya desplazado el mezclador hacia adelante,
puede suceder que la velocidad del aire
de salida sea tan elevada que haga que el
encendido sea dificultoso. Si se produjese
este caso, es necesario desplazar más hacia
atrás, por grados, el mezclador hasta alcanzar
una posición en la que el encendido se lleve
a cabo normalmente y cerciorase de que esta
posición es la definitiva.
Recordamos ahora que es preferible, para la pequeña llama,
limitar la cantidad de aire al estrictamente indispensable para te
ner un encendido seguro incluso en los casos más dificultosos.
M EDI CI ÓN D E LA C O RR I EN TE D E
IONIZACIÓN
Para medir la corriente de ionización, quitar el puente de los
bornes 30-31 del circuito impreso con el quemador apagado
(véase el dibujo). Conectar a los mismos bornes los terminales de
un microamperímetro de escala adecuada y volver a encender el
quemador. Una vez que haya aparecido la llama, será posible medir
el valor de la corriente de ionización, cuyo valor para asegurar el
funcionamiento del aparato debe ser superior a 3 µA.
Terminada la medición, volver a poner el puente que se ha
desconectado con anterioridad.
CONTROLES
Una vez encendido el quemador es necesario controlar los
dispositivos de seguridad (detector de llama, de bloqueo,
termostatos).
• El dispositivo de control de la llama, debe ser capaz de intervenir
durante el funcionamiento, en el caso de que la llama se apague
(este control debe ser efectuado pasado al menos 1 minuto
desde que se haya producido el encendido).
• El quemador debe ser capaz de ponerse en bloqueo y
permanecer así cuando, durante la fase de encendido y
en el tiempo preestablecido por el aparato de mando, no
aparece normalmente la llama. El bloqueo comporta la
parada inmediata del motor y, por tanto, del quemador, y el
encendido del correspondiente indicador luminoso de bloqueo.
Para controlar la eficiencia del detector de la llama y del bloqueo,
proceder del siguiente modo:
- Poner en funcionamiento el quemador.
- Pasado al menos un minuto del encendido extraer el detector
de la llama sacándolo de su alojamiento, oscurecerlo simu-
lando así la falta de llama. (cerrar con un trapo la apertura del
detector de la llama. La llama del quemador debe apagarse
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