Manual de instalación, uso y mantenimiento
---- - ESTUFAS DE MADERA
4.3
4.3
TIRAJE
TIRAJE
Los gases que se forman durante la combustión, al calentarse, sufren un incremento de volumen y, por lo tanto, asumen una
densidad menor con respecto al aire circundante más frío.
Esta diferencia de temperatura entre el interior y el exterior de la chimenea determina una depresión, llamada depresión
térmica, que es mayor cuanto más alto es el conducto de humos y cuanto más alta es la temperatura.
El tiro del conducto de humos debe estar en condiciones de vencer todas las resistencias del circuito de humos de manera tal
que los humos producidos en la estufa, durante la combustión, sean aspirados y dispersos en la atmósfera mediante el
conducto de evacuación y el conducto de humos. Varios son los factores meteorológicos que influyen en el funcionamiento
del conducto de humos, tales como lluvia, niebla, nieve, altitud, pero el más importante es, sin lugar a dudas, el viento, que
tiene la capacidad de provocar, no sólo depresión térmica, sino también depresión dinámica.
La acción del viento varía según se trate de viento ascendente, horizontal o descendiente:
●
Un viento ascendente siempre tiene como efecto aumentar la depresión y, por lo tanto, el tiro.
●
Un viento horizontal aumenta la depresión en caso de instalación correcta del remate de la chimenea.
●
Un viento descendente siempre tiene como efecto disminuir la depresión y a veces la invierte.
El exceso de tiro provoca un sobrecalentamiento de la combustión y, por lo tanto, la
pérdida de eficacia de la estufa.
Parte de los gases de combustión, junto con pequeñas partículas de combustible, son
aspirados en el conducto de humos antes de ser quemados. Ello disminuye la eficacia
de la estufa, aumenta el consumo de pellets y provoca la emisión de humos
contaminantes.
Simultáneamente, la alta temperatura del combustible, debida al exceso de oxígeno,
desgasta la cámara de combustión antes de tiempo. Por el contrario, el tiro insuficiente
disminuye la combustión, enfría la estufa, produce retornos de humo en el ambiente
que disminuyen la eficacia de la estufa, y provoca incrustaciones peligrosas en el
conducto de humos.
Para evitar un tirón excesivo, es conveniente utilizar un regulador de tiro o un
amortiguador (véase la figura de al lado).
4.4
4.4
EFICACIA DE LA ESTUFA
EFICACIA DE LA ESTUFA
Paradójicamente, las estufas de gran eficacia pueden tornar más difícil el trabajo de la chimenea.
El buen funcionamiento de una chimenea depende del aumento de temperatura en su interior provocado por los humos de la
combustión.
Ahora bien, la eficacia de una estufa está determinada por su capacidad de transferir la mayor parte del calor producido al
ambiente que debe calentarse: como consecuencia de ello, a mayor eficacia de la estufa, más "fríos" son los humos
residuales de la combustión y, por lo tanto, menor el "tiro".
Una chimenea tradicional, de concepción y aislamiento aproximados, funciona mucho mejor en servicio que una pequeña
chimenea tradicional abierta o una estufa de mala calidad, en que la mayor parte del calor se pierde con los humos.
Por lo tanto, adquirir una estufa de calidad a menudo significa deber intervenir en el conducto de humos, incluso si ya existía
y funcionaba con instalaciones anteriores, para aislarlo mejor.
Si la estufa no calienta o hace humo, siempre se debe a un tiro defectuoso.
Un error común es conectar el tubo de la estufa a una
chimenea existente, dejando que esta siga en servicio de la
instalación anterior. De esta manera, dos instalaciones con
combustible sólido están unidas por el mismo conducto de
humos, lo cual es incorrecto y peligroso.
Si se usan las dos instalaciones al mismo tiempo, la carga
total de humos puede ser excesiva para la sección existente
de la chimenea, lo que provoca retornos de humo. Si se usa
una sola estufa, el calor de los humos sí provoca el tiro de la
chimenea, el cual, sin embargo, aspirará aire frío también por
la apertura de la instalación apagada, lo que vuelve a enfriar
los humos y bloquea el tiro.
Por último, si ambas instalaciones son ubicadas en distintos
niveles, además de los problemas expuestos, se puede
interferir con el mismo principio de los vasos comunicantes, lo
que provoca una evolución de los humos de combustión
irregular e imprevisible.
Leyenda: CF - Conducto de Humos
83103600 - 1.0 - 14/12/2022
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