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Los alimentos que se vayan a almacenar deben envolverse en film de plástico
limpio o papel alimentario fresco y extenderse para evitar la contaminación y
la pérdida de agua y mezcla de olores.
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Enfríe los alimentos calientes a temperatura ambiente antes de almacenarlos,
de lo contrario aumentará el consumo de electricidad y puede formarse
escarcha en el interior.
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La carne cocinada debe guardarse siempre en un estante por encima de la
carne cruda para evitar la transmisión de bacterias.
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Guarde la carne cruda en un plato lo suficientemente grande para recoger los
jugos y cúbrala con film transparente o papel de aluminio.
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Deje espacio alrededor de los alimentos para que el aire frío pueda circular
por el frigorífico y todas las partes del frigorífico se mantengan frías.
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Para evitar que se mezclen los sabores y se sequen, los alimentos deben
envasarse o taparse por separado. La fruta y la verdura no necesitan
envoltura.
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Deje enfriar los alimentos precocinados antes de introducirlos en el frigorífico.
Así se evita que aumente la temperatura interna del frigorífico.
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Para evitar que se escape el aire frío, procure no abrir la puerta con
demasiada frecuencia. Cuando vuelva de la compra, clasifique los alimentos
que vaya a guardar en el frigorífico antes de abrir la puerta.
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Abra la puerta sólo para meter o sacar alimentos.
Almacenamiento
Zona fresca
Aquí se almacenan los alimentos que tienen una vida útil más larga si se
conservan en un lugar fresco:
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Leche, huevos, yogur, zumos de fruta, quesos duros como el
cheddar, tarros y botellas abiertos de aliños para ensaladas, salsas
y mermeladas, grasas como mantequilla, margarina, cremas para
untar bajas en grasa, grasas para cocinar y manteca de cerdo.
Zona fría
Aquí deben almacenarse los alimentos que necesitan mantenerse fríos
para su conservación:
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Los alimentos crudos y sin cocinar deben envolverse siempre.
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Alimentos precocinados refrigerados, por ejemplo, platos
preparados, pasteles de carne, quesos blandos.
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Carne precocinada, por ejemplo, jamón.
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Ensaladas preparadas (incluidas ensaladas verdes mixtas envasadas,
arroz, ensalada de patatas, etc.).
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Postres, por ejemplo, crema de queso, platos caseros y sobras o
pasteles de nata.