Evitar por todos los medios realizar tratamientos sobre superficies insensibles al
calor y en presencia de alguna de las siguientes enfermedades:
- neoplasias;
- insuficiencia cardiocirculatoria grave.
- hemorragias;
- infecciones locales o sistémicas;
- enfermedades de la piel activas;
- tejidos isquémicos;
- fiebre;
- alteraciones de la coagulación.
Deben considerarse estas advertencias:
- la presencia de áreas del cuerpo con poca sensibilidad (zonas hipoestésicas);
- pacientes especialmente obesos;
- enfermedades inflamatorias en fase aguda.
19
Rev.01.17 del 05.06.2018