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FIN DE LA VIDA ÚTIL DEL EQUIPO
Al final de la vida útil de la unidad, se deben gestionar los residuos electrónicos y eléctricos de
acuerdo a la normativa WEEE (Waste Electrical and Electronic Equipment), Directiva Europea
2012/19/EU, mediante la intervención de gestores de residuos autorizados para cada tipo de
residuo.
Con la finalidad de evitar un impacto negativo sobre el medio ambiente debido a la presencia
de sustancias contaminantes, al finalizar la vida útil de las unidades, por favor, tenga presente la
correcta segregación de los residuos generados tanto peligrosos como no peligrosos.
Residuos no peligrosos: Piezas metálicas pintadas, tubería de cobre, baterías,
intercambiadores, ventiladores, bombas de agua, etc.
Chapa de acero. Se encuentra en la carrocería de la máquina, paneles, pilares, tapas,
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ventiladores, etc.
Cobre: Se encuentra en los intercambiadores de calor de tubo y aletas, en los tubos del
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circuito frigorífico, componentes de control, cables eléctricos y en los motores de los
ventiladores, compresores y actuadores de las compuertas.
Aluminio: Se encuentra en las aletas de los intercambiadores de tubo y aletas, o en el
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cuerpo de los intercambiadores de microcanal, en paneles de la carrocería y en las
compuertas de mezcla, ventilación, aire de retorno, etc.
Residuos peligrosos: Compresores, filtros, gas refrigerante, válvulas, RAEE, etc. Éstos últimos se
deben gestionar por un gestor autorizado.
Fluido refrigerante. Se deben recuperar de la unidad, y se debe verificar con la normativa
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local el tratamiento requerido en función del producto. La gran mayoría de los fluidos
refrigerantes son reciclables.
Fluidos térmicos, como agua glicolada, ya sea con monoetilenglicol o propilenglicol,
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deben ser retirados y reciclados a través de un Gestor Autorizado de Residuos. En ningún
caso deben ser vertidos al ambiente.
Plásticos y polímeros: Se encuentra en elementos de ventilación, componentes
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eléctricos, tacos de soporte, filtros, etc. Además, hay que prestar especial cuidado a los
aislamientos, pues algunos de ellos pueden tener como composición espumas
poliméricas que deben ser tratadas aparte de los plásticos.
Aceites lubricantes. Los compresores contienen aceites lubricantes, generalmente de
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origen orgánico, que además una parte de los mismos suelen estar también en las
tuberías de los circuitos frigoríficos. Se deben recuperar en su totalidad, y bajo ningún
concepto pueden ser vertidos al medioambiente. Deben ser retirados por un Gestor
Autorizado de Residuos.
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