Manual de instrucciones e instalación │ Pro Thermetic │ Marmita de pie PBON-E
Queda expresamente prohibido el uso de sustancias agresivas, tóxicas o inflamables con nuestras marmitas.
Tenga especial cuidado si el alimento forma espuma. Si la tapa se abre cuando aún queda un poco de sobre-
presión residual, el líquido puede salirse, lo que puede provocar lesiones al personal de servicio.
Hay que prestar especial atención en lo que respecta al retraso de ebullición. El retraso de ebullición es el
término para designar el fenómeno por el cual, en condiciones específicas (por ejemplo, en zonas de alta mon-
taña o en altipanos donde la presión atmosférica es más baja que al nivel del mar), algunos líquidos hierven a
menos de 100 °C y, por lo tanto, pueden calentarse más allá de su punto de ebullición sin que estos hiervan.
Este estado es peligroso, puesto que una pequeña y breve sacudida puede generar en muy poco tiempo una
gran burbuja de gas o vapor susceptible de explotar en el recipiente de cocción.
Nuestros aparatos son parcialmente calorífugos y presentan un buen aislamiento. Las temperaturas que se
necesitan para cocinar en los aparatos industriales hacen que determinados componentes (como las tapas, los
revestimientos, etc.) alcancen una alta temperatura durante el funcionamiento. Esto no representa un defecto
de fabricación, sino que se debe al hecho físico de que el acero fino es un buen conductor térmico.
No rocíe el aparato con un chorro de agua, con chorro a vapor ni con un limpiador a alta presión, ni tampoco
vierta agua por encima.
Este aparato no está concebido para ser utilizado por niños ni por personas que tengan mermadas sus capaci-
dades físicas, sensoriales o mentales o que no dispongan de suficientes conocimientos o experiencia,
a menos que estén vigilados por una persona encargada de su seguridad o hayan recibido de ésta las instruc-
ciones correspondientes para utilizar el aparato.
1.4.6
Tratamiento de aparatos para cocinas industriales
Los aceros finos que se utilizan para los aparatos de cocina industriales son materiales de alta calidad y totalmente acreditados.
De hecho, dada la gran cantidad de propiedades positivas que presentan, resultan ideales para el sector alimentario.
Estos aceros finos inoxidables presentan una alta resistencia a la corrosión gracias a la incorporación de una capa pasiva que
se forma cuando llega oxígeno a la superficie de metal. A tal fin basta el contacto con el oxígeno presente en el aire.
Sin embargo, si esta capa pasiva se ve alterada por una influencia mecánica, o si se destruye debido a la acción de un producto
químico que impide además la formación de una nueva capa pasiva (cierre de oxígeno), incluso un acero fino inoxidable puede
sufrir un deterioro por corrosión. Mediante tratamiento con agua que contenga oxígeno se produce una aceleración de la forma-
ción o nueva formación de dicha pasividad. Los productos que tienen una acción reductora (debido a que consumen oxígeno),
como son las sustancias que contienen ácido clorhídrico, los cloruros, los concentrados de especias, la mostaza, la esencia de
vinagre, las pastillas de condimentos o las soluciones con sal común, pueden dañar químicamente o incluso destruir la capa
pasiva del aparato, dependiendo de la concentración y de la temperatura a la que se encuentren. Además, se puede producir un
daño provocado por oxidación externa (partículas de hierro) por la formación de elementos galvánicos y por escasez de oxígeno
(sin entrada de aire o agua con bajo contenido de oxígeno).
Por esta razón, se ha de prestar atención a los siguientes principios durante la utilización de aparatos de acero fino:
La superficie de los aparatos de acero inoxidable debe mantenerse siempre limpia y en contacto con el aire.
En los aparatos sin utilizar, deje la tapa abierta para permitir la entrada de aire. Mediante fregado, retire regu-
larmente las capas de cal, grasa, fécula y clara. Debajo de estas capas puede aparecer corrosión por falta de
entrada de aire. La descalcificación se puede realizar con ácido acético al 10%, ácido fosfórico al 10% o con
agentes descalcificantes disponibles en el comercio.
Las piezas fabricadas en acero inoxidable no pueden estar en contacto con ácidos, especias, sales, etc. duran-
te un período de tiempo prolongado. También los vapores ácidos que se forman durante la limpieza
de azulejos favorecen la corrosión. Las superficies de contacto han de ser lavadas posteriormente con agua
fresca.
Esto se aplica después de su utilización, especialmente después de la cocción de patatas, preparación de pas-
ta, arroz etc. en agua con sal, pues los restos de agua con sal secos forman soluciones salinas muy concen-
tradas que pueden llegar a producir daños por corrosión.
Por esta razón, hay que lavar los aparatos de cocción inmediatamente después de su utilización con agua fres-
ca o llenarlos de agua fría para su enfriamiento. No es conveniente utilizar un aparato de forma exclusiva, por
ejemplo, para la cocción de patatas en agua con sal. Por el contrario, para el acero inoxidable es mejor utilizar
el aparato con diferentes productos a cocinar, como sopas con grasa o verduras ácidas (como la col fermenta-
da).
En la medida de lo posible, evite que la superficie inoxidable sufra daños mecánicos, sobre todo si están pro-
vocados por otros metales. Si entran en contacto acero inoxidable y hierro (lana de acero, virutas de conduc-
ciones, agua con contenido en hierro), puede producirse corrosión.
Las zonas oxidadas recientemente pueden ser limpiadas con productos de limpieza de acción suave o con pa-
pel de lija fino. Las zonas oxidadas de forma más intensa se pueden lavar con solución al 2-5% de ácido oxáli-
co.
Si estos agentes de limpieza no resultaran efectivos, es necesario un tratamiento con ácido nítrico al 10%.
Debido a los riesgos derivados, este tratamiento ha de ser realizado exclusivamente por personal técnico debi-
damente formado y cumpliendo las disposiciones vigentes.
Información sobre la limpieza del aparato (→consulte el capítulo 1.6.3 Limpieza de la marmita).
ES │ 01-2020
87.8050.01
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