Batería y motor de arranque
• En tráfico congestionado desconecte, si
fuese posible, los dispositivos que consu-
men mucha carga de batería: calefactor,
acondicionador de aire, accesorios, etc.
• Al dar arranque al motor en tiempo frío
pise el pedal de embrague para que ali-
gere la resistencia ofrecida por la caja
de cambios y, así, aligere el motor de
arranque y la batería.
• Nunca de arranque al motor por más de
10 segundos de manera ininterrumpida.
Espere 30 segundos para que de un nue-
vo arranque y no insista si el motor no
arranca después de algunas tentativas.
Dirección hidráulica
Si no puede contar con la fuerza que ac-
ciona la dirección hidráulica a causa de la
parada del motor o falla en el funcionamien-
to del sistema, podrá, aún así, girar el vo-
lante, pero será necesario usar más ener-
gía muscular.
Cuidado con el retorno del volante de la
dirección a la posición normal después de
las curvas, que es más lento que en la di-
rección convencional.
3-4
Caja de cambios manual
• Al reducir la velocidad del vehículo,
reduzca la marcha para aquella inmedia-
tamente inferior.
• Al cambiar, pise el pedal de embrague
hasta el final de su recorrido. Esto evita-
rá daños a la caja de cambios y al propio
embrague y eliminará las dificultades de
engrane.
Neumáticos
• Si fuera necesario pasar un obstáculo o
desnivel abrupto de terreno, hágalo des-
pacio y perpendicularmente a los mis-
mos. El impacto de los neumáticos con-
tra esos tipos de obstáculos pueden
causarles daños no perceptibles, pero
con potencial de provocar accidentes fu-
turos en altas velocidades.
• Al estacionar, no acerque las ruedas a la
acera de manera que deforme los neu-
máticos.
• Para evitar resbalones, no conduzca con
neumáticos gastados; manténgalos a la
presión correcta y reduzca la velocidad
cuando la calzada estuviese mojada.
• Mantenga siempre los neumáticos a la
presión correcta (vea las especificaciones
en la Sección 8, bajo Ruedas y neumáti-
cos ), pues éste es el factor más impor-
tante en el cuidado a ellos dedicado, para
evitar desgaste prematuro, a causa de
sobrecalentamiento, mala conducción, au-
mento de consumo de combustible, etc.
Conduciendo en áreas
montañosas o con remolque
El ventilador del radiador es accionado
eléctricamente. La potencia del ventilador no
depende de las revoluciones del motor. A una
revolución más elevada produce más calor y
a una revolución más baja, consecuente-
mente, menos calor. Por eso, en subidas, no
reduzca para marchas más bajas si el
vehículo puede pasar las dificultades sin
esfuerzo en marchas más altas.
Al salir en subidas con vehículo que tracciona
remolque, acelere hasta la revolución
correspondiente al amyor par motor y suelte
despacio el pedal de embrague, manteniendo
la misma revolución del motor.