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Cuando modifique sus tareas, su entorno de trabajo o su postura, escuche a su cuerpo. Las señales
de comodidad o incomodidad que éste emite le ayudarán a saber si los ajustes que ha realizado son
correctos.
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Cambiar de postura frecuentemente.
Evitar apoyar las muñecas sobre las piernas mientras escribe.
Evitar la fatiga en el cuello cuando utilice una computadora en el sofá
o en la cama. Evitar inclinarse hacia atrás demasiado.
Cuando sea posible, intentar utilizar un teclado completo y un dispositivo
de señalización independiente, como un mouse o una bola de seguimiento,
con la computadora cuaderno.
De igual modo, intentar utilizar un monitor de tamaño normal.
Hacer descansos y dar una pequeña vuelta al menos una vez a la hora.
Hacer ejercicio con frecuencia.
Periódicamente, realizar un inventario del estrés que hay en su vida y cambiar
aquello que pueda modificar.
Si padece estos síntomas que crea que están relacionados con el uso de una
computadora, ya sea durante las horas de trabajo o en otras ocasiones, consultar
inmediatamente con un fisioterapeuta cualificado y, si está disponible, con el
departamento médico de su empresa.
Revise sus posturas y hábitos utilizando esta lista.
Periódicamente vuelva a leer esta sección.
Escuche a su cuerpo.
Seguridad y Confort