Antes de apretar la ar-
golla, limpie cuidadosa-
mente el alojamiento ros-
cado. Además, antes de remolcar
el vehículo, asegúrese de que la
argolla esté bien apretada en su
alojamiento roscado.
Antes de que el vehículo
sea remolcado, gire la lla-
ve de contacto a M y lue-
go a S. No quite la llave; en caso
contrario, el volante se bloquea-
ría automáticamente siendo im-
posible girar las ruedas.
Cuando el vehículo está
siendo remolcado, es obli-
gatorio respetar las nor-
mas de circulación de cada país,
tanto las correspondientes al dis-
positivo de remolque en sí, como
las que se refieren al comporta-
miento en carretera.
Cuando el vehículo está
siendo remolcado, re-
cuerde que, al no contar
con la ayuda del servofreno ni de
la dirección asistida, deberá suje-
tar el volante y pisar el pedal con
más fuerza. No utilice cables fle-
xibles para remolcar el vehículo
y evite los tirones. Durante el re-
molque, controle que la fijación
del acoplamiento no dañe los
componentes que están en con-
tacto con el vehículo.
Cuando el vehículo está
siendo remolcado no pon-
ga en marcha el motor.
ADVERTENCIA En las versiónes
con cambio automático, asegúrese de
que el cambio esté en punto muerto
(posición N), compruebe que el vehí-
culo se mueva empujándolo y proce-
da de igual modo que para remolcar
los vehículos con cambio mecánico
normal, ateniéndose a cuanto indica-
do anteriormente. Si es imposible po-
ner el cambio en punto muerto (po-
sición N) no remolque el vehículo,
acuda a un Concesionario de la Red
de Asistencia Fiat.
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