Vigilancia del habitáculo y
sistema antirremolcado
Fig. 56 Junto al asiento del conductor: tecla para
desconectar la vigilancia del habitáculo y el sistema
antirremolcado.
Fig. 57 En la consola del techo: sensores de la vigi-
lancia del habitáculo debajo del portaobjetos.
Si se detectan movimientos en el habitáculo es-
tando el vehículo bloqueado, la vigilancia del ha-
bitáculo dispara la alarma.
El sistema antirremolcado dispara la alarma si
detecta que el vehículo está siendo elevado.
Los sensores de la vigilancia del habitáculo pue-
den encontrarse encima o debajo del portaobje-
tos de la consola del techo.
Conectar la vigilancia del habitáculo y el
sistema antirremolcado
No deberán sobresalir objetos del portaobjetos
de la consola del techo que tapen los sensores de
la vigilancia del habitáculo
que de lo contrario no queda garantizado el fun-
cionamiento correcto de la misma.
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Manual de instrucciones
fig. 57
(flechas), ya
→
Bloquee el vehículo con la llave. Cuando la alarma
antirrobo está conectada, también lo están la vi-
gilancia del habitáculo y el sistema antirremolca-
do.
Desconectar la vigilancia del habitáculo y el
sistema antirremolcado
Para poder desconectarlos tiene que estar encen-
dida la luz de orientación de la tecla
Para que la luz de orientación se encienda, extrai-
ga la llave de la cerradura de encendido y abra la
puerta del conductor.
– Pulse la tecla
fig.
→
ciende un testigo de control amarillo hasta que
se bloquee el vehículo.
– Cierre todas las puertas y el portón del malete-
ro.
– Bloquee el vehículo con la llave. La vigilancia
del habitáculo y el sistema antirremolcado per-
manecen desconectados hasta la próxima vez
que se bloquee el vehículo.
A continuación se relacionan algunas situaciones,
a modo de ejemplo, en las que se deberán desco-
nectar la vigilancia del habitáculo y el sistema an-
tirremolcado antes de bloquear el vehículo:
– Cuando permanezcan personas o animales en
el interior del vehículo, aunque sea por un bre-
ve espacio de tiempo.
– Cuando se tenga que cargar el vehículo en otro
medio de transporte.
– Cuando se transporte el vehículo (por ejemplo,
en un transbordador).
– Cuando se tenga que remolcar el vehículo con
un eje suspendido.
– Cuando se vaya a estacionar el vehículo en una
plaza de garaje de dos alturas.
– Cuando se tenga que dejar el vehículo en un
túnel de lavado.
Riesgo de falsas alarmas
La vigilancia del habitáculo solo funcionará co-
rrectamente si el vehículo está completamente
cerrado. Tenga en cuenta las disposiciones lega-
les al respecto. En los siguientes casos se puede
producir una falsa alarma:
– Si hay una o varias ventanillas parcial o com-
pletamente abiertas.
– Si el techo de cristal está parcial o totalmente
abierto.
fig.
56.
→
56. En la tecla se en-