Consejos para la conducción
Vadeo de calzadas inundadas
Vadeando.
Fig. 220
Para evitar daños en el vehículo en caso de
vadear (p. ej., en caminos inundados), obser-
ve lo siguiente:
Determine la profundidad del agua antes
●
de entrar. El agua puede alcanzar, como má-
ximo, hasta por debajo del larguero inferior
›››
del vehículo
fig.
220.
Conduzca, como máximo, a la velocidad
●
de paso. A una velocidad superior, se puede
formar una ola delante del vehículo que pue-
de hacer entrar agua en el sistema de aspi-
ración del motor o en otras piezas del vehícu-
lo.
Nunca se detenga en el agua, nunca con-
●
duzca hacia atrás y no pare el motor.
Antes de un vadear desactive el sistema
●
›››
Start-Stop
pág.
231.
230
Conducción
ATENCIÓN
Conducir por agua, fango, barro, etc.
●
puede reducir la efectividad de frenado y
prolongar la distancia de frenado – ¡Peligro
de accidente!
No efectúe ninguna maniobra de frenado
●
repentina y fuerte inmediatamente des-
pués de un vadeo.
Después de un vadeo debe limpiar y se-
●
car los frenos lo antes posible frenando a
intervalos. Efectúe frenados con objeto de
secar los frenos y limpiar los discos de fre-
no sólo si lo permiten las condiciones del
tráfico. No debe poner en peligro al resto
de los conductores.
CUIDADO
En caso de vadeo, se pueden dañar se-
●
riamente piezas del vehículo como motor,
cambio, catalizador, tren de rodaje o siste-
ma eléctrico.
Los vehículos que vadean en sentido
●
contrario originan olas que pueden superar
el nivel de agua permitido para su vehículo.
Debajo del agua puede haber baches,
●
barro o piedras que pueden dificultar o im-
pedir el vadeo.
No conduzca por agua salada. La sal
●
puede causar corrosión. Todas las piezas
del vehículo que entren en contacto con el
agua salada se han de lavar inmediata-
mente con agua dulce.
Aviso
Después de un vadeo recomendamos que
acuda a un servicio especializado para una
inspección.
Evitar daños en el vehículo
Para evitar daños en el vehículo, deberá
prestar un cuidado especial:
en las carreteras y caminos en mal estado,
●
al cruzar los bordillos de carretera,
●
al acercarse a rampas muy inclinadas etc.,
●
en las partes del vehículo situadas en la
●
parte inferior del vehículo, como el spóiler y
el tubo de escape.
Esto es válido especialmente en los vehículos
con un tren de rodaje muy bajo (deportivo) y
cuando el vehículo está completamente car-
gado.