Lavar el vehículo únicamente en lugares es-
pecialmente diseñados para tal fin, para que
el agua con eventuales residuos de aceite, grasa
o combustible no entre en la red de cloacas. En
algunas regiones, está prohibido lavar los vehícu-
los fuera de los lugares especialmente reservados
para esta finalidad.
Al adquirir productos para la conservación,
elija los productos ecológicamente correc-
tos.
Los restos de productos de conservación no
deben arrojarse a la basura doméstica. Ob-
servar la información del envase.
Lavar el vehículo
Tenga en cuenta
y
capítulo, en la página 183.
Cuanto más tiempo permanezcan sobre la super-
ficie del vehículo los restos de insectos, excre-
mentos de pájaros, resinas de árboles, polvos ur-
banos o industriales, alquitrán, partículas de ho-
llín y otro tipo de suciedades agresivas, más per-
sistentes serán sus efectos destructivos. Las altas
temperaturas, como la fuerte incidencia de radia-
ción solar, potencian su efecto corrosivo. Lavar
cuidadosamente y en intervalos regulares tam-
bién la parte inferior del vehículo.
Sistema de lavado automático
Observar las orientaciones disponibles en el sis-
tema de lavado automático. Antes de una lavado
automático, tomar las precauciones habituales,
como por ejemplo, cerrar todos los vidrios y re-
batir los retrovisores exteriores hacia adentro,
para evitar daños. Si el vehículo tiene piezas
agregadas como, por ejemplo, espóiler, maletero
o antena, informar obligatoriamente al operador
del sistema de lavado automático
La pintura del vehículo es tan resistente que el
vehículo generalmente puede lavarse sin proble-
mas en sistemas de lavado automáticos. Mientras
tanto, el desgaste real de la pintura depende mu-
cho de la estructura del sistema de lavado auto-
mático. Volkswagen recomienda lavar en siste-
mas de lavado automáticos sin cepillos.
184
Conservación, limpieza, mantenimiento
, al principio de este
.
→
Para eliminar posibles restos de cera de los vi-
drios y así evitar que las escobillas de los limpia-
vidrios puedan rayarlos, tenga en cuenta las si-
guientes indicaciones
→
drios y los espejos retrovisores externos.
Lavado manual
Al lavar el vehículo manualmente, primero debe
ablandarse la suciedad con abundante agua y en-
juagar lo máximo posible.
Luego, limpie el vehículo con una esponja blanda,
con un guante de lavado o un cepillo, aplicando
poca presión. Comenzar por el techo y continuar
de arriba hacia abajo. Utilizar un champú de lim-
pieza únicamente en suciedad persistente.
Enjuague con cuidados la esponja o el guante de
lavado con frecuencia.
Por último, limpiar las ruedas, las soleras y partes
similares. Para esto, utilizar una segunda esponja.
ADVERTENCIA
Las piezas puntiagudas del vehículo pueden
ocasionar lesiones.
● Proteger las manos y los brazos de partes
puntiagudas al limpiar, por ejemplo, la parte
inferior del vehículo o la parte interna de las
cajas de la rueda.
ADVERTENCIA
Después de lavar el vehículo, puede que la ca-
pacidad de frenado quede mermada, aumen-
tando la distancia de frenado debido a la hume-
dad en los discos de freno y en las pastillas de
freno o a su congelamiento durante el invierno.
● "Seque los frenos y elimine el hielo" median-
te maniobras de frenando cuidadosas. Proce-
da sin poner en riesgo a los demás conducto-
res ni dejar de respetar las determinaciones
legales.
AVISO
● La temperatura del agua no debe superar los
+60 °C.
● Para evitar daños a la pintura, no lavar el vehí-
culo bajo la luz solar directa.
● No utilice esponjas duras, esponjas ásperas de
cocina o similares, ya que podría dañar la su-
perficie.
pág. 186, Limpiar los vi-