Motor de arranque:
Si todos los controles realizados anteriormente han determinado que la causa se
encuentra en el propio motor de arranque, se hace necesario su desmontaje y posterior
desarmado para verificar todos sus componentes internos a fin de ver la posibilidad de
repararlo sin llegar a la necesidad de su sustitución.
1.- Motor de arranque. 2.- Escobilla positiva. 3.- Resorte. 4.- Espárragos de unión. 5.- Porta
escobillas. 6.- Junta de estanqueidad. 7.- Tuerca de fijación del cable de alimentación. 8.- Arandelas.
9.- Junta tórica. 10.- Junta tórica. 11.- Tornillos 6x28 mm.
Desmontar la tapa del motor retirando los dos espárragos de sujeción (4) y desmontar
todos los componentes.
Escobillas y resortes:
-
Verificar la continuidad entre el borne del cable de alimentación y la escobilla
positiva (2).
-
Retirar los resortes y extraer las escobillas de sus alojamientos para poder
medir su longitud. Si esta es menor de 8'5 mm., sustituirlas.
-
El motor de arranque es de imanes permanentes por lo que habrá que observar
el estado de éstos en el interior de la carcasa. No deben encontrarse rotos ni
excesivamente sucios puesto que esto alteraría la cota de entrehierro.
Rotor:
1 Verificar visualmente el estado de las delgas del colector. Comprobaremos
que no se encuentran interrumpidas las conexiones de las bobinas al colector.
Asimismo, la superficie del colector debe estar limpia y sin rayaduras, grietas
ni otros defectos. Un desgaste excesivo del colector implica la sustitución
completa del rotor.
2 Limpiaremos el colector con un trapo que no deje hilachas humedecido en
gasolina. Asimismo, limpiaremos el espacio entre delgas que corresponde al
aislante rascando con un palillo de madera.