3. comenzar a extraerla del interior del vehículo de emergencia o de la bandeja del soporte hasta que las patas traseras
desciendan automáticamente;
Antes de continuar con la extracción de la camilla, asegúrense de que las patas traseras estén
perfectamente rígidas y de que se apoyen establemente en el suelo.
Antes de que las patas se apoyen en el suelo, el operador tiene que sostener aproximadamente la mitad
del peso del paciente y de la camilla. Para pacientes especialmente pesados, soliciten la ayuda de otro
personal auxiliar (§ 3.3.).
4. seguir extrayendo la camilla hasta que las patas delanteras hayan descendido automáticamente.
Les informamos de que es de fundamental importancia asegurarse de que la plataforma de la ambulancia
donde se apoya la camilla plegada sea, a plena carga, al menos 4/5 cm más alta que la distancia existente
entre la rueda delantera de carga y el suelo (por ej., si la distancia entre la rueda y el suelo es de 64 cm, la
plataforma de carga de la ambulancia tiene que ser de 68 cm como mínimo). En caso contrario, en la fase de
descarga, las patas delanteras, no teniendo la posibilidad de extenderse completamente, podrían causar la
caída accidental de la camilla, provocando graves problemas y traumatismos al paciente transportado.
Para evitar caídas accidentales de la camilla durante la fase de descarga, comprueben periódicamente que
la altura de la plataforma del vehículo de emergencia, con el fin de que las patas de la camilla puedan
extenderse completamente (véase la figura 12).
En todo caso, antes de extraer completamente la camilla, asegúrense siempre de que las patas delanteras
estén perfectamente rígidas y que se apoyen establemente en el suelo.
4.5. CONSERVACIÓN DESPUÉS DEL USO
Habiendo sido realizado con materiales resistentes a la corrosión y a las condiciones ambientales previstas para el uso normal, la
camilla para ambulancias no precisa atenciones específicas. No obstante, se recomienda guardarla en un ambiente cerrado, teniendo
cuidado de proteger del polvo y de la suciedad los dispositivos de mando y regulación y las partes sometidas a deslizamiento o a
rotación, para disfrutar de la máxima eficiencia y seguridad en el momento de la utilización.
Ambos modelos pueden ser plegados (posición completamente baja), reduciendo de tal forma el espacio ocupado y facilitando su
almacenamiento (§ 4.4.)
4.6. ANOMALÍAS Y RELATIVAS INTERVENCIONES
La tabla contiene las anomalías, con las relativas causas y las soluciones sugeridas, que podrían manifestarse durante el uso de la
camilla.
Si el mal funcionamiento persiste, no insistan probando soluciones personales; acudan a la Asistencia Técnica
de ME.BER. (§ 7.1.), así como en caso que se manifiesten anomalías no previstas en el presente diagnóstico.
Utilicen siempre piezas de repuesto originales (§ 7.3).
MERCURY
Figura 12
92
Rev.08 140722