MANEJO
3 - Sistema electrónico
de estabilidad*
Los vehículos con sistema antibloqueo
(ABS) pueden ir equipados adicionalmen-
te con un sistema electrónico de estabili-
dad (ESP).
Con ayuda del ESP se aumenta el control
sobre el vehículo en situaciones límites de
dinámica de marcha, tales como, p. ej., al
recorrer curvas a demasiada velocidad. El
ESP amplía la función ABS/EDS/MSR/ASR
y reduce el peligro de derrapaje en cual-
quier condición de la calzada. Este siste-
ma trabaja para todo el margen de veloci-
dades en combinación con el ABS. En caso
de una perturbación del ABS, también fa-
llaría el ESP.
El ESP se conecta automáticamente cada
vez que arranca el motor. En caso necesa-
rio se puede desconectar y conectar pulsan-
do la tecla conjuntamente con el ASR.
Estando desconectado el sistema, se en-
ciende el testigo luminoso ESP - véase la
página 60.
En casos excepcionales, cuando se desea
el resbalamiento, resulta ventajoso desco-
nectar el ESP.
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Por ejemplo:
- al conducir con cadenas antideslizantes
ESP
para la nieve
- al arrancar el vehículo en nieve profun-
da o sobre un suelo movedizo
- al hacer arrancar el vehículo atascado
A continuación se debería volver a conec-
tar el sistema.
Nota
A fin de garantizar un funcionamiento sin
perturbaciones del ESP, deben ir monta-
dos neumáticos iguales en las cuatro rue-
das. Unos neumáticos con circunferencias
de rodadura diferentes pueden dar lugar a
reducciones no deseadas de la potencia
del motor.
Las reparaciones en el vehículo (p. ej., en
el motor, sistema de frenos, tren de rodaje
o una combinación diferente de neumáti-
cos y llantas) pueden influir sobre el fun-
cionamiento del ESP.
Funcionamiento del ESP
En el sistema electrónico de estabilidad
(ESP) están integrados el ABS, MSR, EDS
y ASR. Aparte de los datos disponibles por
estas funciones, la unidad de control ESP
recibe magnitudes adicionales que ponen
a disposición unos sensores altamente
sensibles. Se miden: el movimiento girato-
rio centrifugante en torno al eje vertical del
vehículo, la aceleración transversal del
vehículo, la presión de frenado y el ángulo
de orientación de la dirección.
Nota
Con ayuda del movimiento de la dirección
y de la velocidad del vehículo se determi-
na el sentido de marcha requerido por el
conductor y se compara constantemente
con el comportamiento del vehículo. En
caso de divergencias, tales como, p. ej.,
un comienzo de derrapaje del vehículo, el
ESP frenará automáticamente la rueda en
cuestión y hará que disminuya el número
de revoluciones del motor.
Las fuerzas que actúan en la rueda duran-
te el frenado estabilizan nuevamente el ve-
hículo. En caso de sobrevirar el vehículo
(tendencia a derrapar la parte trasera), el
freno intervendrá preferentemente en la
rueda delantera exterior en la curva; en
caso de subvirar el vehículo (tendencia a
empujar hacia fuera de la curva), interven-
drá en la rueda interior en la curva.
Atención
Los límites predeterminados por la
física tampoco los puede suprimir el
ESP. Esto debe tenerse muy en cuen-
ta, sobre todo, al conducir por cal-
zadas heladas y mojadas.
El modo de conducir hay que adap-
tarlo siempre al estado de la calzada
y a la situación del tráfico. El mayor
nivel de seguridad que proporciona
el ESP no le debe inducir al conduc-
tor a correr riesgos.